La economía europea continúa anclada a la estadounidense

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
Las economías europea y estadounidense no se han desacoplado. Existía la esperanza de que con la mayor talla alcanzada por la UE tras las nuevas adhesiones y con el euro, Europa fuera menos dependiente de la fuerza estadounidense de gravedad, pero no ha sido así y el Ecofin lo constataba con cierta desilusión. La amplitud del impacto de la crisis ha sorprendido a los ministros de la UE.
Las economías europea y estadounidense no se han desacoplado. Existía la esperanza de que con la mayor talla alcanzada por la UE tras las nuevas adhesiones y con el euro, Europa fuera menos dependiente de la fuerza estadounidense de gravedad, pero no ha sido así y el Ecofin lo constataba con cierta desilusión.
La amplitud del impacto de la crisis en la economía comunitaria, ya lo decía el viernes el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, ha sorprendido a los ministros de Finanzas, que hace bien pocos meses, cuando estalló el escándalo de las hipotecas ‘subprime’, apelaban a las virtudes del equilibrado sistema europeo -con baja deuda y déficit exterior, y con finanzas públicas muy saneadas en la mayor parte de los Estados miembros-, para descartar un impacto significativo de la tormenta financiera estadounidense a este lado del Atlántico. Hace ahora un año, en el Ecofin informal de Oporto, quienes este fin de semana se sentaban a la mesa en Niza apostaban entonces por “un impacto residual” de la crisis en Europa, al tiempo que efectuaban llamadas a la calma.

Las cosas no han salido como estaba previsto y los ministros de Finanzas de los 27, reunidos en la capital de la Costa Azul francesa, reconocían los efectos de tres choques combinados -inflación, tipos de cambio y crisis financiera- en el estado de la economía comunitaria.
El estrepitoso fallo en los pronósticos de hace un año no ha dado lugar a cambios en las recetas para salir de la crisis: el Pacto de Estabilidad, con su consiguiente rigor presupuestario, y la Agenda de Lisboa para la modernización de la economía europea, constituyen los pilares básicos sobre los que la UE debe cimentar la recuperación.
Por lo demás, y en el aspecto reactivo a la situación, los 27 se proponen reforzar los mecanismos de supervisión de mercados y operadores financieros. Hay dos piezas clave en el horizonte, como precisaba en rueda de prensa la ministra francesa de Finanzas, Christine Lagarde: la nueva directiva de solvencia de aseguradoras, también conocida por “Solvencia-2”, de cuyas características discutían este sábado los ministros en el Ecofin y cuya aprobación se quiere acelerar, y la de recursos propios de la banca. El Ecofin también aprobaba un refuerzo del protagonismo del Banco Europeo de Inversiones en la financiación de la pequeña y mediana empresa.