La energía y alegría de la Batukacada sacuden la capital
Guadalajara se desperezó ayer al ritmo de la percusión brasileña que proporcionaron cuatro grupos de músicos de la Gran Batukacada, quienes se recorrieron las principales vías de la capital. Tambores, timbales, agogós y cuicas pusieron el ritmo en la mañana de ayer sábado a las 12.00 horas del mediodía, cuando los 32 integrantes del espectáculo, vestidos de un alegre amarillo, se concentraron en la plaza de Santo Domingo, de donde partieron divididos para alegrar ruidosamente a los vecinos por distintas direcciones.
Unos partieron por el paseo de las Cruces, otros en dirección al parque de San Roque, otros por la calle Mayor y el último grupo se dirigió por la calle Virgen del Amparo. Durante una hora, los percusionistas demostraron su habilidad -y su aguante- al permanecer continuamente elaborando nuevos y pegadizos ritmos, lo que provocó no pocos ciudadanos se quedasen mirando a su paso y divirtiéndose de su contagiosa energía.
La productora Demasiado Producciones fue sobre la que recayó la agradable tarea de poner la nota de jolgorio y alegría como preludio de lo que espera en la inminente llegada de las fiestas. Animados por el buen tiempo, los guadalajareños enseguida mostraron su curiosidad ante el ruidoso paso de la batukacada, que de nuevo retornó a la plaza de Santo Domingo para despedirse hasta las18.00 horas, cuando volvieron a repetir recorridos y, más tarde, a las 20.30 horas pusieron la guinda con una exitosa actuación en el quiosco de la música. Todos los músicos, grandes profesionales, tal y como indicó la organizadora del evento, Arancha Íñigo. La mayoría de los percusionistas, venidos de Madrid y cariocas, demostraron que llevan el ritmo en la sangre. Aunque los pocos españoles que también supieron estar a la altura dejaron constancia de su buen hacer en el arte de la percusión. Se trata este de un grupo que lleva contagiando el espíritu festivo y carnavalero durante cinco años. La verdad que el que pasa se engancha, aseguró uno de los responsables de Demasiado Producciones, quien respondía al nombre de David y añadió, convencido, que es un reclamo perfecto para atraer a la gente.