La fuga de Cervera y otros reduce al mínimo la presencia de UPN
01/10/2010 - 09:45
El diputado crítico de UPN, Santiago Cervera, el parlamentario europeo Javier Pomés, y los senadores Ignacio Palacios y José Cruz Pérez Lapazarán abandonaron las filas de UPN para incorporarse al nuevo PP de Navarra. Las bajas se formalizaron este lunes, la víspera de que el Comité Ejecutivo Nacional del PP apruebe la constitución de la nueva Comisión Gestora popular para refundar la organización en Navarra.
Una semana después de la ruptura, la disolución del pacto de coalición con el PP ha dejado al partido foralista con un diputado, un senador y ningún representante en la Eurocámara. Sólo María Izquierdo en el Senado y Carlos Salvador en el Congreso permanecen en UPN tras la crisis, mientras que Miguel Sanz consiguió conservar intacto su grupo parlamentario en la Cámara autonómica.
A pesar de haber sido el principal ariete de la discrepancia, Cervera retrasó su dimisión a la espera de presentar alegaciones ante la Comisión de Disciplina y Conflictos de UPN en el procedimiento de los expedientes disciplinarios que se instruyeron por sus declaraciones críticas y la ruptura de la disciplina en la votación de los Presupuestos del Estado en el Congreso. Este lunes, el diputado intentó celebrar su comparecencia ante el órgano disciplinario fuera de la sede del partido del que está suspendido de militancia pero no lo consiguió, de manera que envió sus argumentaciones por correo electrónico.
Reprobar al discrepante, amenazar a quien se expresa de modo diferente o incluso actuar represiva y punitivamente contra él (como éste es el caso) -acusa el diputado en su escrito- supone un intento de cercenar no sólo los derechos esenciales de militancia sino los propios derechos civiles de raíz constitucional y fundamento democrático. En la misma línea, arremete contra Sanz y apunta que un partido en el que sólo se escuche la voz de su dirigente máximo es un partido propio de una dictadura bananera.
Sobre su negativa a seguir las instrucciones del Consejo Político que dictó la abstención en la votación presupuestaria, indicó entre sus argumentos que se vulneró su derecho, como cargo público, a participar en las decisiones que le conciernen y aseguró que no fue ni informado ni consultado sobre el cambio anunciado por Sanz a un medio de comunicación el 7 de septiembre. En definitiva, denunció la carencia democrática que ha regido todo el proceso.
A pesar de haber sido el principal ariete de la discrepancia, Cervera retrasó su dimisión a la espera de presentar alegaciones ante la Comisión de Disciplina y Conflictos de UPN en el procedimiento de los expedientes disciplinarios que se instruyeron por sus declaraciones críticas y la ruptura de la disciplina en la votación de los Presupuestos del Estado en el Congreso. Este lunes, el diputado intentó celebrar su comparecencia ante el órgano disciplinario fuera de la sede del partido del que está suspendido de militancia pero no lo consiguió, de manera que envió sus argumentaciones por correo electrónico.
Reprobar al discrepante, amenazar a quien se expresa de modo diferente o incluso actuar represiva y punitivamente contra él (como éste es el caso) -acusa el diputado en su escrito- supone un intento de cercenar no sólo los derechos esenciales de militancia sino los propios derechos civiles de raíz constitucional y fundamento democrático. En la misma línea, arremete contra Sanz y apunta que un partido en el que sólo se escuche la voz de su dirigente máximo es un partido propio de una dictadura bananera.
Sobre su negativa a seguir las instrucciones del Consejo Político que dictó la abstención en la votación presupuestaria, indicó entre sus argumentos que se vulneró su derecho, como cargo público, a participar en las decisiones que le conciernen y aseguró que no fue ni informado ni consultado sobre el cambio anunciado por Sanz a un medio de comunicación el 7 de septiembre. En definitiva, denunció la carencia democrática que ha regido todo el proceso.