La futura iglesia del SP 05 esperará la llegada de más vecinos
01/10/2010 - 09:45
Por: BEATRIZ PARIENTE
La Diócesis de Sigüenza-Guadalajara ha decidido esperar a la llegada de nuevos vecinos para iniciar el proyecto de construcción de la iglesia número 19 de la capital. Por el momento, en breve escriturarán la parcela de 2.500 metros cuadrados cedida por el Ayuntamiento. El Consistorio capitalino acordó ceder una parcela de 2.500 metros cuadrados en el sector SP-05 en la parcela denominada E-01 a petición de la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara para iniciar en estos terrenos el proyecto de construcción de un nuevo templo que prestara servicio a la población del nuevo desarrollo residencial del norte capitalino.
El Ayuntamiento de Guadalajara acordó ceder una parcela de 2.500 metros cuadrados en el sector SP-05 en la parcela denominada E-01 a petición de la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara para iniciar en estos terrenos el proyecto de construcción de un nuevo templo que prestara servicio a la población del nuevo desarrollo residencial del norte capitalino.
El vicario general, Eugenio Abad, explica que, a pesar de que el proceso de cesión ha sido rápido y que en próximas fechas se escriturará la parcela, no está previsto empezar la construcción a corto plazo. La Diócesis pretende ser consecuente con la realidad de la zona y considera que las iglesias de San Diego y El Salvador ofrecen, por el momento, un servicio adecuado a los habitantes del entorno. Más adelante, cuando empiecen a llegar más familias, nos pondremos con ello.
En cualquier caso, la Diócesis ya ha aventurado que el futuro templo tendrá unas características similares a los construidos en última instancia. Son 2.500 metros para la iglesia y para el complejo parroquial, con la casa del sacerdote y una zona de aparcamiento, explica.
En cuanto a su financiación, tal y como ha ocurrido en el caso de la iglesia de El Salvador, en Aguas Vivas, está previsto que se efectúe por fases. El Obispado siempre aporta una cantidad inicial, pero después es necesario que la comunidad y el sacerdote consignado pongan de su parte, además de las subvenciones de instituciones públicas, como el Ayuntamiento, la Diputación provincial o la Junta de Comunidades, que suelen contribuir a la causa cuando resulta necesario.
Las iglesias de la capital
En 50 años, se han construido 13 parroquias nuevas en la capital, lo que suma hoy en día 18 templos, desde los más antiguos, como la concatedral de Santa María, hasta el más reciente, la parroquia de El Salvador. La labor social que desempeñan es actualmente su principal preocupación, función que no podrían llevar a cabo a tal nivel sin el apoyo incondicional de sus feligreses. Hace 50 años, la capital contaba con cinco parroquias, además de otras muchas capillas de conventos, santuarios y otras edificaciones eclesiásticas, a disposición de los feligreses, que las utilizaban primordialmente para el culto (asistir a las misas, participar en oraciones y rezos y acudir a las celebraciones litúrgicas). Esas cinco parroquias Santa María la Mayor, Santiago Apóstol, San Nicolás el Real, San Ginés y San Pablo eran suficientes para dar además la cobertura social que acompaña a las iglesias, atender a los ciudadanos ante cualquier problema que se les pudiera plantear y a cualquier hora del día o de la noche. Entre los años 60 y 70 se crearon ocho parroquias nuevas, una en 1967 (la del Santísimo Sacramento); dos en el 69 (San Juan de Ávila y San Pedro Apóstol); otras dos en el 71 (María Auxiliadora y San José Artesano); San Pascual Bailón en 1973 y San Antonio de Padua en 1974. Para solucionar la atención religiosa y pastoral de las últimas décadas se crearon nuevas parroquias, en total cinco más, desde 1981. Se trata de San Juan de la Cruz (1981), Virgen de la Salud (1981), Beata María de Jesús (1981), San Diego de Alcalá (1998) y la última en unirse al Arciprestazgo de Guadalajara ha sido la de El Salvador que presta servicio desde hace tiempo pero se encuentra sin terminar aún.
El vicario general, Eugenio Abad, explica que, a pesar de que el proceso de cesión ha sido rápido y que en próximas fechas se escriturará la parcela, no está previsto empezar la construcción a corto plazo. La Diócesis pretende ser consecuente con la realidad de la zona y considera que las iglesias de San Diego y El Salvador ofrecen, por el momento, un servicio adecuado a los habitantes del entorno. Más adelante, cuando empiecen a llegar más familias, nos pondremos con ello.
En cualquier caso, la Diócesis ya ha aventurado que el futuro templo tendrá unas características similares a los construidos en última instancia. Son 2.500 metros para la iglesia y para el complejo parroquial, con la casa del sacerdote y una zona de aparcamiento, explica.
En cuanto a su financiación, tal y como ha ocurrido en el caso de la iglesia de El Salvador, en Aguas Vivas, está previsto que se efectúe por fases. El Obispado siempre aporta una cantidad inicial, pero después es necesario que la comunidad y el sacerdote consignado pongan de su parte, además de las subvenciones de instituciones públicas, como el Ayuntamiento, la Diputación provincial o la Junta de Comunidades, que suelen contribuir a la causa cuando resulta necesario.
Las iglesias de la capital
En 50 años, se han construido 13 parroquias nuevas en la capital, lo que suma hoy en día 18 templos, desde los más antiguos, como la concatedral de Santa María, hasta el más reciente, la parroquia de El Salvador. La labor social que desempeñan es actualmente su principal preocupación, función que no podrían llevar a cabo a tal nivel sin el apoyo incondicional de sus feligreses. Hace 50 años, la capital contaba con cinco parroquias, además de otras muchas capillas de conventos, santuarios y otras edificaciones eclesiásticas, a disposición de los feligreses, que las utilizaban primordialmente para el culto (asistir a las misas, participar en oraciones y rezos y acudir a las celebraciones litúrgicas). Esas cinco parroquias Santa María la Mayor, Santiago Apóstol, San Nicolás el Real, San Ginés y San Pablo eran suficientes para dar además la cobertura social que acompaña a las iglesias, atender a los ciudadanos ante cualquier problema que se les pudiera plantear y a cualquier hora del día o de la noche. Entre los años 60 y 70 se crearon ocho parroquias nuevas, una en 1967 (la del Santísimo Sacramento); dos en el 69 (San Juan de Ávila y San Pedro Apóstol); otras dos en el 71 (María Auxiliadora y San José Artesano); San Pascual Bailón en 1973 y San Antonio de Padua en 1974. Para solucionar la atención religiosa y pastoral de las últimas décadas se crearon nuevas parroquias, en total cinco más, desde 1981. Se trata de San Juan de la Cruz (1981), Virgen de la Salud (1981), Beata María de Jesús (1981), San Diego de Alcalá (1998) y la última en unirse al Arciprestazgo de Guadalajara ha sido la de El Salvador que presta servicio desde hace tiempo pero se encuentra sin terminar aún.