La Junta moderniza los regadíos para llegar a la media de CLM

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: M.TOVAR ATANCE
MARCHAMALO
Del total de la superficie agraria útil que hay en el país, el 17 por ciento de los terrenos son de regadío; en Castilla-La Mancha representan el 11% y en la provincia alcarreña se sitúa en el 5% con unas 22.000 hectáreas, por debajo de la media regional y provincial.
“De ahí que el esfuerzo que la Junta está haciendo sea importante” con el fin de incrementar y, al mismo tiempo, modernizar estas zonas de Guadalajara y mejorar la eficiencia energética, según explicó ayer Miguel Chillarón, director general de Mejora de Explotaciones Agrarias de la Junta, momentos antes de la inauguración de un curso sobre el agua y la eficiencia energética en el regadío.
El Gobierno regional está impulsando, en la actualidad, varios proyectos de transformación de las instalaciones en las zonas regables de Cogolludo, el Bornova e Illana-Leganiel. En la primera se actuará en 2.025 hectáreas, con una inversión de 20 millones de euros que se prevé pueda estar operativo en 2010. En la última se actuará en otras 2.000 hectáreas y se prevé que el comienzo de las obras sea inminente. En los últimos años, se han modernizado un total de 7.000 hectáreas, la tercera parte del total mediante la iniciativa privada con un coste próximo a los 13 millones, de los que la Junta ha subvencionado la mitad. En cuanto al proyecto de Albalate y Almoguera, el director general adelantó que está en un “impass” por lo que, dijo, “cuando los afectados se interesen retomaremos el tema”. Según Chillarón, el interés en Almoguera era menor porque gran parte del regadío se había transformado a través de la iniciativa privada, mientras que en el caso de Albalate implicaría un “sobrecoste” por estar por encima del embalse.
La escasez de agua y el compromiso de uso de los ríos del Júcar o el Tajo para otras comunidades autónomas han hecho que los regadíos en la región sean muy jóvenes y, por ello, “estamos a la cabeza en España en cuanto al uso de riego a presión”, según Chillarón.
De las 485.000 hectáreas de regadío que existen en la región el 94 por ciento disponen de un sistema de presión –por aspersión y por goteo– que consumen 4.500 metros cúbicos de agua por hectárea, menos que la media nacional que se sitúa en 6.000. “Estamos haciendo un consumo muy eficiente. En Castilla-La Mancha hay mucha experiencia en cuanto al uso eficiente del agua”, afirmó el Miguel Chillarón.