La llegada del Sorbe solucionó el problema en los cascos

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, José María Barreda, inauguró, el 14 de octubre de 2004,unas obras, las de abastecimiento a la Mancomunidad Campiña Baja, que daban respuesta a una demanda necesaria y muy reivindicada por los municipios de la zona, ya que “suponen un gran alivio para esta mancomunidad y no es de recibo que en el siglo XXI haya municipios con problemas de abastecimiento de agua”, decía en el acto inaugural el mandatario regional.
Las obras de abastecimiento de aguas para la Mancomunidad de la Campiña Baja benefician a los municipios de Torrejón del Rey, Valdeaveruelo, Valdenuño-Fernández, Galápagos y El Casar. Este último se puede abastecer de un depósito con capacidad para 1.000 metros cúbicos. Además, un gran depósito emplazado en la localidad de Torrejón del Rey, conocido como La Jarosa es el que alberga el agua que posteriormente distribuye a los cascos urbanos.
Desde su llegada a la zona, los municipios que componen la Mancomunidad Campiña Baja no han vuelto a sufrir restricciones de caudal. Este agua, que llega hasta los cascos urbanos, no lo hace hasta las urbanizaciones que siguen dependiendo de unos pozos que, en largos periodos de sequía, como el atravesado en 2002, sus aguas alcanzaban las capas freáticas y se convertían en no potables. Sin embargo, esto no ha sucedido en los últimos años, pero la situación se puede volver a reproducir si no se realiza la acometida del agua procedente de la MAS.