La ‘marca china’ pasa de los juguetes tóxicos a la fama mundial

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: COLPISA
Tras organizar con éxito unos Juegos Olímpicos de altos vuelos, Pekín ha impuesto la imagen de una China moderna y eficaz, de la que sus empresas podrían ser grandes beneficiaria, aunque los expertos creen que su impacto en la economía será, en principio, moderado.
“Los Juegos Olímpicos marcarán, como su adhesión a la Organización Mundial del Comercio (OMC), otra etapa en la transformación de China en una economía eficaz orientada hacia el mercado y financieramente sofisticada”, afirmaba el pasado fin de semana Daniel Chui, de JF Asset Management.
Con este objetivo, Pekín no ha escatimado gastos: unos 40.000 millones de dólares de inversión para hacer de estos Juegos los más caros de la historia olímpica. Si a esta cifra se suma el coste de medidas extremas como el cierre de cientos de fábricas llegando incluso hasta las provincias vecinas para asegurar un aire puro a los visitantes, China dejó claro su empeño.
“Basta examinar el camino recorrido desde hace un año. Entonces, la marca China atravesaba grandes dificultades por el episodio de los juguetes tóxicos” y otros escándalos en torno a la calidad de sus productos, comenta Greg Paull, director de la sociedad de estudios de mercado R3 en Pekín.
La marca China, presente en el espíritu del público de los Juegos, se relaciona ahora más con los patrocinadores nacionales, como Lenovo, cuarto fabricante mundial de computadoras, Haier, gigante de los electrodomésticos, o China Mobile, primer operador telefónico mundial en número de abonados. “Patrocinando los Juegos de invierno y de verano, Lenovo se ha convertido en una marca global altamente reconocida”, destaca el consultor Roland Berger.