La Otra Guadalajara reclama al Estado la autovía de Molina y una fiscalidad rural
Dos años llevaba La Otra Guadalajara sin hacer ruido, pero trabajando, reflexionando. Ahora consideran que ha llegado el momento de volver a alzar la voz y lo han hecho para reclamar que se cumpla una antigua promesa realizada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero: el desdoblamiento de la N-211 entre Alcolea del Pinar y Molina de Aragón. Se trata de una medida urgente con la que esperan, junto con una modificación de la fiscalidad rural, frenar el proceso de despoblación de la comarca.
A pesar de la lucha contra esa lacra que está realizando la plataforma, los resultados no son nada halagüeños. Según los datos del INE respecto a 2018, la población comarcal ha pasado de 11.000 a 9.000 habitantes desde 2007, una reducción de casi el 20 por ciento que ha dejado una densidad de 2,18 habitantes por kilómetro cuadrado.
Por eso, han hecho una solicitud formal al subdelegado del Gobierno, Ángel Canales, para pedir que se complete el desdoblamiento de la N-211, algo que aumentaría la importancia de Molina como cruce de caminos. “Si la línea recta es la distancia más corta entre dos puntos, la comarca de Molina está muy bien puesta en el mapa peninsular”. Por ejemplo, es la distancia más corta entre Barcelona, Madrid y Lisboa o entre Valencia y Santander. “Siempre había sido un cruce de caminos, pero en el último siglo ha quedado relegada”. También entre Valencia y Santander.
Esto debería hacerse con la aplicación de una fiscalidad rural que tuviera en cuenta la diferencia entre negocios rurales y urbanos. “Debe tenerse en cuenta la densidad de población, su envejecimiento, el predominio del sector primario, la natalidad y lejanía de centros urbanos”, entre otros factores. Además, estas bonificaciones deben aplicarse a individuos y empresas residentes en la zona y afectar al IRPF, los contratos para trabajadores, la energía, el transporte y bienes de consumo.