La 'patrulla de barrio' llega a Escritores-La Rambla, un año después de su puesta en funcionamiento en Los Manantiales

Justo un año después de que el servicio comenzara a funcionar en Los Manantiales –donde sus resultados son ya palpables–, ayer iniciaba su trabajo en la zona de La Rambla y Escritores la segunda patrulla de la Policía de Barrio, un instrumento policial creado por el actual equipo de Gobierno con el objetivo de que la Policía Local esté “más cerca del ciudadano” y aumente así “su sensación de seguridad”, al tiempo que se logra disuadir la acción de los vándalos y las actividades delictivas por la mera presencia policial. El alcalde de la ciudad, Antonio Román, acompañado por la concejala de Seguridad, Movilidad y Tráfico, María José Agudo, y el intendente jefe de la Policía Local, Julio Establés, visitó ayer la zona, concretamente el parque de los Ingenieros Militares, en la avenida del Ejército, donde limitan un barrio y otro, para dar a conocer la noticia a los propios representantes vecinales de La Rambla y Escritores, Luis Miguel Yago y María del Mar Sánchez, respectivamente.
Esta segunda patrulla de Policía de Proximidad o de Barrio comenzó ayer a prestar sus servicios en la zona, la cual escrutará y por la que paseará “fundamentalmente a pie”, como dijo Román, durante todas las jornadas de lunes a viernes, tanto de mañana como de tarde, en un horario ininterrumpido de 7.45 a 22.00 horas. Los agentes que forman la patrulla, además, contarán con el apoyo del “resto de servicios de la Policía Local en la ciudad en caso de que se produzca alguna incidencia que no puedan atender por sí solos”, detalló Román. “Su misión es estar en contacto permanente con los ciudadanos, tratar de mejorar la convivencia, hacer cumplir las ordenanzas del Ayuntamiento de Guadalajara y responder a cualquier demanda de los ciudadanos en relación a elementos como el tráfico, la convivencia, la seguridad o el cumplimiento de las ordenanzas”, explicó el alcalde capitalino, quien volvió a reiterar que el objetivo último de este novedoso servicio no es otro que “los ciudadanos tengan esa Policía próxima para incrementar la sensación de seguridad y bienestar”. Una Policía “próxima” y “amiga” cuyo fin no será “sancionar”, como aseguró Román, sino “ayudar a la convivencia”. Además, en manos de estos agentes quedará evitar que se sigan produciendo problemas que afectan a ambos barrios, como el absentismo escolar o el menudeo de drogas, problemas a los que apuntaron directamente ambos presidentes vecinales, esperando y deseando que el nuevo servicio consiga erradicarlos.

Lo último, sancionar
Parafraseándose a sí mismo, Román recuperó la frase que ya pronunció cuando puso en marcha el servicio en Los Manantiales, hace ahora un año, y que resume la filosofía que sigue la Policía Local en su trabajo del día a día, también en su servicio de Policía de Barrio. En sus propias palabras, Román explicó que de lo que se trata es de “informar antes de corregir, corregir antes de amonestar o reprender, y de amonestar o reprender antes que denunciar”, pues, en su opinión, ésta debe ser la última medida a tomar por los agentes del orden antes de agotar el resto de las vías de disuasión y diálogo. “Creemos que la denuncia debe ser la última medida”, continuó Román, y que “la información, la corrección y la amonestación, siempre con carácter previo a la denuncia, es una forma de que la Policía sea una Policía amiga, una Policía cercana”.
Por último, el alcalde, quien dijo “estar convencido” de que el nuevo servicio va a ayudar a “mejorar y favorecer” la convivencia en un barrio que acusa algunos problemas de esta índole a causa de la presencia de algunos colectivos, destacó haber “cumplido” con La Rambla y Escritores, pues, como recordó, anunció que sería el segundo barrio de la capital en disponer de Policía de Barrio después del verano y así ha sido. Por su parte, los presidentes vecinales de ambos barrios, que reconocieron los problemas que vienen acusando desde hace tiempo, agradecieron la llegada del servicio, el cual habían solicitado en cuanto supieron de su existencia, y aseguraron esperar que sirva para eliminarlos o, al menos, que tenga un fin “disuasorio, que simplemente con estar la gente no aparque en doble fila o que no haya personas maleantes en algunos sitios, que desaparezcan este tipo de cosas”, en palabras del propio Yago.
Una vez implantada esta segunda patrulla de la Policía de Barrio, por ahora, y aunque tanto la Concejalía de Seguridad y la Policía Local trabajan ya en ello, de momento no hay fecha ni ubicación para la puesta en marcha de la tercera, aunque como aseguró el alcalde, la voluntad es implantar el servicio en toda la ciudad paulatinamente. Como explicó Román, habrá que esperar a que termine el proceso de selección y oposiciones para cubrir las cinco plazas de policía –por el procedimiento de movilidad– que quedan vacantes en la plantilla y será entonces cuando se tome una decisión al respecto.

Buenos datos en Los Manantiales
Por otro lado, tras un año de trabajo en Los Manantiales, los datos que maneja la Policía Local en cuanto a los servicios allí realizados por su patrulla de barrio son francamente llamativos por el importante incremento respecto a los que se venían registrando anteriormente. En palabras de Román, “en los diez primeros meses de este año, según los datos de 1 de enero a 31 de octubre y comparando las actuaciones policiales del año 2008 a los mismos diez meses de 2009, vemos que se han incrementado casi de 4.000 actuaciones a 11.000”. Dicha multiplicación de servicios supone un incremento que se acerca al 200 por cien. De entre ellos destacan desde notificaciones de Policía Administrativa hasta acciones de Policía Judicial, pasando por actuaciones relacionadas con el tráfico, la seguridad ciudadana o con los servicios asistenciales, como detalló el alcalde.
Pero al margen de las actuaciones y servicios específicos realizados en el barrio, Román destacó la importancia de la mera presencia de los agentes de la Policía Local en las calles, por sus fines disuasorios y por su proximidad, que hacen que “se ayude a prevenir la comisión de delitos y a incrementar la sensación y percepción de seguridad”. En este sentido, el alcalde señaló que esta Policía de Proximidad no sería posible sin la “apuesta decidida” que ha realizado el equipo de Gobierno en los últimos dos años por incrementar los medios materiales y humanos de la Policía Local. “Veníamos de un mandato en el que esto se había abandonado, la Policía Local necesitaba más medios y recursos humanos; y para poder implementar nuevos servicios hay que implementar los recursos humanos y materiales, y en eso llevamos trabajando de manera intensa dos años y yo creo que se van viendo resultados de una línea política decidida”, aseveró el alcalde.
Sólo en este último año han pasado a engrosar las filas de la plantilla de la Policía Local nueve nuevos policías y seis agentes de movilidad más. Además, se han adquirido nuevos vehículos que han venido a ampliar la flota y hace pocos días conocíamos una nueva inversión, en este caso de 120.000 euros, que irá destinada a la compra y el refuerzo de nuevas medidas de seguridad en el seno de la Policía Local, un cuerpo armado que actualmente se acerca a los 120 efectivos.