La plaza de la capilla Luis de Lucena estrenará accesibilidad en unos días
01/10/2010 - 09:45
Por: ANDRÉS BACHILLER. GUADALAJARA
OBRAS
Las obras de reforma dejan atrás el maltrecho estado que ha padecido durante años
A falta de algunos detalles y de colocar elementos como las barandillas, varios operarios daban ayer los últimos retoques a la nueva plaza ubicada junto a la capilla Luis de Lucena, objeto de unas obras de remodelación en las últimas semanas que permiten dejar atrás el maltrecho estado en el que ha estado durante años.
El propio alcalde, Antonio Román, acompañado del concejal Mariano del Castillo, cursó ayer visita a estos últimos trabajos, que han tenido un coste para las arcas municipales de unos 60.000 euros y que se iniciaron el pasado mes de mayo. Estarán concluidos en tan sólo unos días, según confirmó Del Castillo.
Con esta actuación, tal y como confirmó el primer edil, se remata la obra de la primera fase que se acometió hace meses en el casco histórico, ya que fue una petición expresa de los vecinos residentes en las inmediaciones.
El elemento más destacable de la plaza es la gran escalinata, confeccionada de piedra caliza, al igual que el resto del espacio. Se ha buscado una piedra igual a la que había previamente, apuntó ayer a pie de obra el alcalde. Se ha optado por mantener el diseño que tenía esta plaza.
Una rampa diseñada para el paso de personas con movilidad reducida ha mejorado la accesibilidad de este espacio, deficitaria hasta ahora.
Cambio de especies vegetales
La actuación se culminará con la instalación de algunos bancos para fomentar la estancia en la plaza. Los que se han quedado por el camino son algunos de los chopos que había anteriormente, que han sido retirados porque estaban deteriorando de manera importante el pavimento y se han sustituido por nuevas especies que en el futuro darán sombra en esta zona de la plaza.
El alcalde abundó en la importancia de esta pequeña plaza, porque es un lugar desde donde se contempla uno de los monumentos más bellos de la ciudad Guadalajara, como es la capilla del Luis de Lucena, y tan sólo unos metros de la concatedral.
Con esta actuación, tal y como confirmó el primer edil, se remata la obra de la primera fase que se acometió hace meses en el casco histórico, ya que fue una petición expresa de los vecinos residentes en las inmediaciones.
El elemento más destacable de la plaza es la gran escalinata, confeccionada de piedra caliza, al igual que el resto del espacio. Se ha buscado una piedra igual a la que había previamente, apuntó ayer a pie de obra el alcalde. Se ha optado por mantener el diseño que tenía esta plaza.
Una rampa diseñada para el paso de personas con movilidad reducida ha mejorado la accesibilidad de este espacio, deficitaria hasta ahora.
Cambio de especies vegetales
La actuación se culminará con la instalación de algunos bancos para fomentar la estancia en la plaza. Los que se han quedado por el camino son algunos de los chopos que había anteriormente, que han sido retirados porque estaban deteriorando de manera importante el pavimento y se han sustituido por nuevas especies que en el futuro darán sombra en esta zona de la plaza.
El alcalde abundó en la importancia de esta pequeña plaza, porque es un lugar desde donde se contempla uno de los monumentos más bellos de la ciudad Guadalajara, como es la capilla del Luis de Lucena, y tan sólo unos metros de la concatedral.