La presidenta de los estanqueros asegura que no hay problema para recargar el abono transporte en la capital
15/01/2016 - 12:11
El inicio de año ha resultado un tanto complicado para quienes se enteraron tarde de que debían sustituir sus antiguos abonos transporte por unas tarjetas magnéticas nuevas. El cambio comenzó en septiembre del año pasado para los jóvenes de hasta 26 años de edad ya que, fruto de un convenio con el Consorcio de Madrid, los guadalajareños, conquenses y toledanos podían disfrutar de su abono a un precio de 20 euros (frente a los 78,6 que costaba antes el de nuestra zona) y, además, se ampliaba el tramo de edad de esta modalidad de los 23 a los 26 años.
Entonces ya se produjeron problemas para actualizar los billetes ante la avalancha de peticiones de jóvenes para renovar sus abonos.
La situación ha sido similar con el inicio de año para el resto de usuarios del transporte público ya que desde el 1 de enero los antiguos abonos ya no eran válidos. La única manera de hacerse con uno nuevo era pedir cita previa con el Consorcio de Madrid para recoger las nuevas tarjetas magnéticas en los días disponibles (la cita puede pedirse por Internet).
Una vez superado este trámite, además, es preciso recargar la tarjeta con el mes correspondiente, paso que puede realizarse en las máquinas del Metro de Madrid o, en el caso de Guadalajara, en los estancos que ya han recibido el terminal para poder realizarlas.
Un artículo de El País recogía las quejas de usuarios de Guadalajara indicando los problemas que habían tenido a la hora de recargar sus títulos. Sin embargo, la presidenta de la Asociación de Estanqueros de Guadalajara, Elena Viana, ha querido aclarar que actualmente no hay problemas de recarga del abono transportes en la capital y ha agregado que también las expendedurías de Azuqueca, Marchamalo, Cabanillas... hacen lo propio con sus clientes. Como mucho falta uno o dos estancos para poder recargar, apostillaba, de un total de 17 repartidos por la capital.
El primero en disponer de las nuevas máquinas de recarga fue, por motivos obvios, el situado junto a la estación de Cercanías. Después el resto de estancos de la capital han ido incorporando estos sistemas que sustituyen al antiguo procedimiento manual en el que los estanqueros rellenaban un billete con cinco dígitos.
Antes el propio abono podía solicitarse en los estancos y tardaba alrededor de una semana en recibirse para la modalidad joven o bien se recogía en el momento en el resto de supuestos. El sistema actual no es ni mejor ni peor, antes era rellenar un número y ahora depende de un terminal, comenta la presidenta.
Los estanqueros, en esta cuestión, son meros intermediarios entre el usuario y el Consorcio de Transportes de Madrid ya que apenas ganan un 1,6 por ciento bruto de las recargas efectuadas.
Resultan beneficiarios de los abonos conveniados con la Comunidad de Madrid los vecinos de Guadalajara (zonas E1 y E2), así como los de Toledo, Ávila y Segovia.