La primera del póker de verbenas para los mayores
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
FERIAS Y FIESTAS
El paseo de San Roque era una hervidero de gente en la tarde-noche de ayer. La explicación habría que encontrarla en la cercanía de actividades del programa de Ferias, en la presencia de carpas de peñas y, también, en la bonanza de la climatología en el día de ayer.
Una buena porción de esos viandantes empezó a evaporarse de la zona hacia las 19.30-20.00 horas. Concretamente la más adulta de todos.
Esa era la hora convenida para la primera, la más esperada, de las verbenas para jubilados a celebrar en el interior de la piscina de San Roque, una de las citas ineludibles del programa de Ferias a las que nunca les faltan partícipes y que de nuevo ayer se organizó bajo el patrocinio de Ibercaja.
Todavía de día, las primeras decenas que luego se convertirían en centenas comenzaron a entrar por la entrada del recinto deportivo.
Con la música calentando motores, la primera parada de los mayores fue una improvisada barra donde se les repartían bollos, pastas y limonada. Con posibilidad de repetir.
Para la degustación les esperaba a lo largo de buena parte de las instalaciones sillas entre las que iban repartiéndose los recién llegados. Unas al raso; otras, por si acaso, bajo cubierta, aunque al cierre de esta edición no había caído ninguna gota, al contrario de lo que ha sucedido en otras ocasiones.
COSTÓ ARRANCAR. Son tres las horas de los que disponen los jubilados y pensionistas para disfrutar con esta verbena. Sin embargo, ayer costó arrancar un poco los primeros bailes. Tras unas primeras canciones en las que sólo la vista de los presentes y algún tarareo acompañó al músico-vocalista, fue una pareja la que, decidida, rompió el hielo de todos los presentes y se animó a dar los primeros pasos de baile en solitario.
Sólo duró unos segundos. Tras ellos, también se animaron unas cuantas parejas, de tal forma que la pista ya no estuvo nunca vacía en toda la noche.
Por el recinto pasaron unos cuantos de los políticos municipales que conforman el Ayuntamiento, con el alcalde, Antonio Román, a la cabeza, aunque también se pudo ver en los primeros compases al segundo teniente de alcalde, Jaime Carnicero, y a los concejales Luis García y Mariano del Castillo.
La cita con la música y con la piscina de San Roque para los mayores continuará durante los próximos tres días, hasta el sábado. El horario, el mismo que en la jornada de ayer.
La seguridad en el recinto está asegurada con la presencia de operarios municipales y con un vallado que protege las zonas de los vasos para el baño llenos de agua ya sucia y otros espacios restringidos.
Esa era la hora convenida para la primera, la más esperada, de las verbenas para jubilados a celebrar en el interior de la piscina de San Roque, una de las citas ineludibles del programa de Ferias a las que nunca les faltan partícipes y que de nuevo ayer se organizó bajo el patrocinio de Ibercaja.
Todavía de día, las primeras decenas que luego se convertirían en centenas comenzaron a entrar por la entrada del recinto deportivo.
Con la música calentando motores, la primera parada de los mayores fue una improvisada barra donde se les repartían bollos, pastas y limonada. Con posibilidad de repetir.
Para la degustación les esperaba a lo largo de buena parte de las instalaciones sillas entre las que iban repartiéndose los recién llegados. Unas al raso; otras, por si acaso, bajo cubierta, aunque al cierre de esta edición no había caído ninguna gota, al contrario de lo que ha sucedido en otras ocasiones.
COSTÓ ARRANCAR. Son tres las horas de los que disponen los jubilados y pensionistas para disfrutar con esta verbena. Sin embargo, ayer costó arrancar un poco los primeros bailes. Tras unas primeras canciones en las que sólo la vista de los presentes y algún tarareo acompañó al músico-vocalista, fue una pareja la que, decidida, rompió el hielo de todos los presentes y se animó a dar los primeros pasos de baile en solitario.
Sólo duró unos segundos. Tras ellos, también se animaron unas cuantas parejas, de tal forma que la pista ya no estuvo nunca vacía en toda la noche.
Por el recinto pasaron unos cuantos de los políticos municipales que conforman el Ayuntamiento, con el alcalde, Antonio Román, a la cabeza, aunque también se pudo ver en los primeros compases al segundo teniente de alcalde, Jaime Carnicero, y a los concejales Luis García y Mariano del Castillo.
La cita con la música y con la piscina de San Roque para los mayores continuará durante los próximos tres días, hasta el sábado. El horario, el mismo que en la jornada de ayer.
La seguridad en el recinto está asegurada con la presencia de operarios municipales y con un vallado que protege las zonas de los vasos para el baño llenos de agua ya sucia y otros espacios restringidos.