La Red de Calor con Biomasa llega al cruce de la avenida de El Ejército hacia General Vives Camino
Cada vez llega a más vecinos de la ciudad.
La Red de Calor de Guadalajara continúa sumando vecinos en la capital. Sigue su implantación y ya ha iniciado las obras para llegar al cruce de la avenida de El Ejército hacia la calle General Vives Camino en los próximos días. Los interesados que todavía no se han conectado a la Red tienen la oportunidad de adherirse al mayor proyecto energético urbano de energía renovable puesto en marcha en Guadalajara que da calor para calefacción y agua caliente sanitaria (ACS) a los vecinos de las comunidades de propietarios, edificios públicos y negocios privados de la ciudad.
El responsable de Desarrollo de Red de Calor, Constantino Álvarez, anuncia que “durante los últimos años hemos ido mejorando el servicio de las Redes que tenemos en marcha, lo que nos ha aportado una experiencia sólida que estamos aplicando a la Red de Guadalajara, añadiendo nuevos equipos que aportan seguridad, como el nuevo depósito de acumulación de energía”.
Paralelamente, las obras también continúan en el parque de El Ejército. “El momento de conectarse para afrontar ya esta campaña de frío con biomasa es ahora, así que no duden en ponerse en contacto con nosotros, con su Administrador para conocer la Red, o con los dos principales mantenedores de la ciudad con los que hemos llegado a un acuerdo de colaboración para trabajar conjuntamente”, puntualiza Álvarez. Entrará en servicio en enero de 2020.
La Red de Calor con Biomasa ya es uno de los mejores ejemplos en España de cómo se puede y se debe democratizar el uso de las energías renovables, explicando sus ventajas medioambientales de una forma didáctica, asumiendo la realidad del ahorro económico y de los beneficios técnicos y de confort que produce su incorporación a la vida diaria. Más de 500 vecinos se han adherido ya al nuevo proyecto.
La empresa promotora del proyecto, Rebi, también ha puesto en marcha ya una nueva plataforma web de gestión energética que facilitará al Administrador de Fincas la tarea de control de los consumos en tiempo real, gracias a la fibra óptica que incorpora la Red. “Y lo más importante es que facilitará una transparencia en el funcionamiento que ninguna otra energía fósil, ya sea gas natural o gasóleo, puede suministrar. Esta herramienta permitirá controlar mejor y reducir el gasto energético”, añade Constantino Álvarez.
No solamente el ahorro económico es la principal motivación de los guadalajareños para conectarse a la Red, “sino que estamos viendo que las reuniones que tenemos con los vecinos en sus comunidades de propietarios que existe una gran conciencia sobre el medio ambiente”.
Y es que uno de los secretos de la rápida expansión de las redes de calor es que la conexión no supone ningún sobrecoste ni derrama para los vecinos porque la pequeña obra en la sala de calderas corre a cargo de la empresa, mientras que el consumidor solo paga la energía térmica de biomasa que consume. “Ahora también estamos llegando a los edificios de viviendas de nueva construcción. De esta manera, quien compre una vivienda en un bloque nuevo en la zona de actuación de la Red, verá reflejado en su contrato que incorporará Red de Calor con Biomasa; la sala de calderas cuenta con una estación de intercambio de placas que hace el trasvase de la energía de los tubos de la calle al circuito del edificio, con un equipo de producción de calefacción y otro de agua caliente. El consumo se mide de manera individualizada con un contador de kilovatios colocado en el rellano del portal y no es necesario que el habitáculo disponga de ningún otro equipo ni caldera. Es una novedad que también estamos llevando a nuestra Red de Soria con cinco años de funcionamiento y la Red Aranda de Duero puesta en funcionamiento recientemente, y que en un futuro también llegará a las redes en proyecto”.
También la Red de Calor de Guadalajara ultima las obras de la central térmica en el polígono de El Balconcillo, en la calle Méjico número 45 donde se ha habilitado una oficina de información. Los vecinos de la capital comenzarán en breve a conectarse ya a la Red cuyo consumo previsto es de 100.000.000 kWh anuales y 25.000 toneladas de astilla al año. Guadalajara reducirá sus emisiones de CO2 a la atmósfera en 15.000 toneladas anuales. El mantenimiento y suministro de la infraestructura supondrá la creación de 60 empleos directos e indirectos y entre 18 y 20 millones de euros de proyecto consolidado.
La Red de Calor con Biomasa de Guadalajara continúa con su oferta de lanzamiento y descuentos promocionales. “Es tan sencillo como ponerse en contacto con la Red de Calor, pedir al equipo de Rebi que se acerque a la comunidad de propietarios y, de forma gratuita, reunirá las veces que haga falta a todos los vecinos para informarles y explicarles qué es una red de calor, y qué ventajas económicas, sociales, técnicas y medioambientales tiene conectarse a la Red”.
La central térmica de Rebi en Guadalajara que abastece a la Red de Calor con Biomasa incorpora la última tecnología y equipos punteros en el sector, y está disponible para que cualquier persona o colectivo interesado pueda conocer cómo funciona. Los equipos técnicos de Rebi organizan visitas guiadas acomodadas al horario de los visitantes.
La red discurre desde la central por la calle Méjico, calle Antonio Buero Vallejo para salir a la Avda. del Ejército. El primer anillo alberga la calle General Vives Camino, calle Dr. Layna Serrano, Avda. Castilla, Molina de Aragón, Paseo Dr. Fernández Iparraguirre, calle Brihuega, y calle Alcalá de Henares.
El segundo anillo transcurrirá por la calle Dr. Layna Serrano, calle de la Virgen de la Soledad, calle de Alonso Núñez de Reinoso, calle Virgen del Amparo y Paseo Dr. Fernández Iparraguirre. Existirán dos ramales: uno continuando Dr. Layna Serrano, y otro continuando por la Avda. del Ejército hacia la Escuela de Magisterio y Palacio del Infantado. A partir de esos puntos, la red continuará diseñándose según la demanda de los vecinos.