La reforma de los autobuses deja el coste del precio por kilómetro en 2,58 euros
01/10/2010 - 09:45
Por: ANDRÉS BACHILLER. GUADALAJARA
La modificación salió adelante con el rechazo de los grupos de la Oposición
El pleno del Ayuntamiento, con los votos a favor del Grupo Popular y sin el apoyo de PSOE e IU, aprobó la modificación de las líneas de autobuses urbanos que se encargó de adelantar hace unos días la Concejalía de Transporte. Los cambios en sus líneas implican una revisión del precio por kilómetro a cobrar por la empresa concesionaria, Trapsa, de tal forma que queda fijado en 2,58 euros por kilómetro recorrido, IVA incluido.
Según detalló ayer la edil del ramo, María José Agudo, los vehículos recorrerán, una vez entre en vigor la modificación, a partir del mes de septiembre, 1.318.096 kilómetros anuales, con más de 46.000 horas de servicio.
Entre los objetivos de esta reforma, la concejala responsable nombró la mejora de las frecuencias, llevar el transporte a los nuevos desarrollos urbanísticos que carecen de él Los Valles, Las Lomas, La Muñeca, Las Cañas o estirarse aún más por Aguas Vivas, dar servicio al polígono El Balconcillo, a las nuevas residencias e instalacionesJefatura de Policía, pabellón de Aguas Vivas, Centro Oncológico, residencia de mayores de El Balconcillo o el CAMF, entre otros o establecer comunicaciones al otro lado de la A-2 con la zona del sector SP-10, es decir, en el que se sitúa El Corte Inglés. Con ello, Agudo considera que se mejorará la movilidad por la capital.
Rechazo de la Oposición
Echando en cara la hipotética falta de consenso político para acordar la reforma, el Grupo Socialista, de boca de su concejala Julia de Miguel, aseguró que la iniciativa es un despropósito e insulto a la inteligencia de los ciudadanos. De Miguel recordó la ausencia de participación ciudadana en estos cambios, reprochándole a Agudo que no los hubiera presentado antes en los Consejos de Barrio.
En una acusación que ya adelantó esta misma semana, De Miguel cree que con esta reforma la que más va a ganar es la empresa, que va a hacer caja con unas líneas que, en su opinión, serán en algunos casos muy largas alguna de más de 25 kilómetros, calificándolas de turísticas. Los ciudadanos van a tener un calvario para llegar a sus destinos [...] Nos parece una gran chapuza, una reforma insuficiente. Además, la socialista reclamó la promesa pendiente de la gratuidad para estudiantes y familias numerosas.
Izquierda Unida, por su parte, acusó de prepotencia al equipo de Gobierno a la hora de abordar las modificaciones, puesto que considera que no se han atendido sus alegaciones. Su portavoz, José Luis Maximiliano, criticó que esta reforma se basa en el modelo antiguo de transporte de la ciudad, poco útil, en su opinión, en los tiempos actuales. Se ha perdido la posibilidad de hacer una reforma integral, que era lo que le estaban pidiendo los conductores de los autobuses. Maximiliano criticó la gran longitud de la línea 9 que tardará prácticamente una hora en trazar su recorrido, las vueltas que dará la 1, las excesivas frecuencias por El Balconcillo o la supresión de algún tramo por la calle Toledo, entre otras de las modificaciones previstas.
Entre los objetivos de esta reforma, la concejala responsable nombró la mejora de las frecuencias, llevar el transporte a los nuevos desarrollos urbanísticos que carecen de él Los Valles, Las Lomas, La Muñeca, Las Cañas o estirarse aún más por Aguas Vivas, dar servicio al polígono El Balconcillo, a las nuevas residencias e instalacionesJefatura de Policía, pabellón de Aguas Vivas, Centro Oncológico, residencia de mayores de El Balconcillo o el CAMF, entre otros o establecer comunicaciones al otro lado de la A-2 con la zona del sector SP-10, es decir, en el que se sitúa El Corte Inglés. Con ello, Agudo considera que se mejorará la movilidad por la capital.
Rechazo de la Oposición
Echando en cara la hipotética falta de consenso político para acordar la reforma, el Grupo Socialista, de boca de su concejala Julia de Miguel, aseguró que la iniciativa es un despropósito e insulto a la inteligencia de los ciudadanos. De Miguel recordó la ausencia de participación ciudadana en estos cambios, reprochándole a Agudo que no los hubiera presentado antes en los Consejos de Barrio.
En una acusación que ya adelantó esta misma semana, De Miguel cree que con esta reforma la que más va a ganar es la empresa, que va a hacer caja con unas líneas que, en su opinión, serán en algunos casos muy largas alguna de más de 25 kilómetros, calificándolas de turísticas. Los ciudadanos van a tener un calvario para llegar a sus destinos [...] Nos parece una gran chapuza, una reforma insuficiente. Además, la socialista reclamó la promesa pendiente de la gratuidad para estudiantes y familias numerosas.
Izquierda Unida, por su parte, acusó de prepotencia al equipo de Gobierno a la hora de abordar las modificaciones, puesto que considera que no se han atendido sus alegaciones. Su portavoz, José Luis Maximiliano, criticó que esta reforma se basa en el modelo antiguo de transporte de la ciudad, poco útil, en su opinión, en los tiempos actuales. Se ha perdido la posibilidad de hacer una reforma integral, que era lo que le estaban pidiendo los conductores de los autobuses. Maximiliano criticó la gran longitud de la línea 9 que tardará prácticamente una hora en trazar su recorrido, las vueltas que dará la 1, las excesivas frecuencias por El Balconcillo o la supresión de algún tramo por la calle Toledo, entre otras de las modificaciones previstas.