La Ronda de Lupiana gana el primer premio del Concurso de Villancicos
01/10/2010 - 09:45
Por: B. P. O.
La décimo octava edición del Concurso de Villancicos Ciudad de Guadalajara se ha convertido en el ejemplo palpable del interés por recuperar las tradiciones más antiguas de la provincia por parte de diferentes agrupaciones. Cada año, este certamen, ha ido creciendo en cantidad y, sobre todo, en calidad, atrayendo el interés de mayor número de personas. Tanto es así, que ayer el aforo del teatro-auditorio Buero Vallejo se quedó pequeño para dar respuesta a la expectación que causó el certamen.
Por riguroso orden de participación, los 15 grupos participantes, procedentes de localidades como la capital, Azuqueca, Yunquera, Aranzueque, Cantalojas, Atanzón, Lupiana, Tendilla, Cifuentes, Alhóndiga y Sacedón, interpretaron en escena dos piezas diferentes de su repertorio, una de ellas propia de la cultura autóctona y otra más de cualquier procedencia. Los concursantes fueron los siguientes: CEIP Badiel; Coro Infantil Colegio Niña María; Suena La Alcarria; Ronda Cifontina; Sangre Castua, del Hogar Extremeño de Guadalajara; Ronda Alhóndiga; Grupo Folclórico La Jara, de la Casa Regional de Extremadura de Azuqueca; Grupo Rondalla Acacias, del Centro Social de Día Las Acacias, de Azuqueca; Asociación de Mujeres de Sacedón; Coro Virgen de la Granja, de la parroquia de San Pedro de Yunquera; Murga de Aranzueque; Real Zambombada de Atanzón; Asociación Cultural Hayedo de Tejera Negra, de Cantalojas; Ronda Villa de Lupiana y El Grupo Amanecer, representando a la parroquia Santa María la Mayor.
La organización fue milimétrica y consiguió guiar a cada grupo de entre 10 y 40 personas hasta el escenario, controlando su acceso y su salida, para evitar que hubiese interrupciones en el transcurso del evento. Ya en faena, cada agrupación escogió la pieza que creyó más conveniente para mostrar en público, cada una con un estilo propio, una puesta en escena singular y una instrumentación variada, con zambombas, rabeles, panderetas, las guitarras, cascabeles y botellas de anís, como elementos más comunes. Gracias a ellos pudieron escucharse piezas tradicionales, como Carrasclás o Dale, dale, dale y otras inéditas, como la canción interpretada por la Murga de Aranzueque, dedicada a las abejas de Guadalajara.
Antes del veredicto, el Grupo Folclórico del Palacio de la Cotilla interpretó distintas piezas, tanto de baile como de canto, entre las que hubo lugar para jotas y seguidillas.
Llegada la hora de la resolución, la fuerza y la puesta en escena de la Zambombada de Atanzón, formada por 40 personas, les hizo merecedores de una mención especial por parte del jurado del certamen. Éste estuvo formado por Luis García, concejal de Participación Ciudadana, Mariano del Castillo, edil de Servicios Públicos, Nuria Matamalo, directora de la Banda Provincial de Guadalajara, Pedro Pablo García, director del Orfeón Santa Teresa y José Antonio Alonso, cantautor. Suya fue la tarea de elegir como ganador a la Ronda Villa de Lupiana placa y 500 euros ; segundo, la Ronda Cifontina placa y 250 euros; y tercero, el Coro Virgen de la Granja, de Yunquera de Henares, placa y 100 euros. El mejor grupo joven resultó ser el Coro Infantil del Colegio Niña María, que obtuvo placa y 250 euros de premio.
La Ronda de Lupiana cerró el acto haciendo un aplaudido bis de su Pobre nació.
La organización fue milimétrica y consiguió guiar a cada grupo de entre 10 y 40 personas hasta el escenario, controlando su acceso y su salida, para evitar que hubiese interrupciones en el transcurso del evento. Ya en faena, cada agrupación escogió la pieza que creyó más conveniente para mostrar en público, cada una con un estilo propio, una puesta en escena singular y una instrumentación variada, con zambombas, rabeles, panderetas, las guitarras, cascabeles y botellas de anís, como elementos más comunes. Gracias a ellos pudieron escucharse piezas tradicionales, como Carrasclás o Dale, dale, dale y otras inéditas, como la canción interpretada por la Murga de Aranzueque, dedicada a las abejas de Guadalajara.
Antes del veredicto, el Grupo Folclórico del Palacio de la Cotilla interpretó distintas piezas, tanto de baile como de canto, entre las que hubo lugar para jotas y seguidillas.
Llegada la hora de la resolución, la fuerza y la puesta en escena de la Zambombada de Atanzón, formada por 40 personas, les hizo merecedores de una mención especial por parte del jurado del certamen. Éste estuvo formado por Luis García, concejal de Participación Ciudadana, Mariano del Castillo, edil de Servicios Públicos, Nuria Matamalo, directora de la Banda Provincial de Guadalajara, Pedro Pablo García, director del Orfeón Santa Teresa y José Antonio Alonso, cantautor. Suya fue la tarea de elegir como ganador a la Ronda Villa de Lupiana placa y 500 euros ; segundo, la Ronda Cifontina placa y 250 euros; y tercero, el Coro Virgen de la Granja, de Yunquera de Henares, placa y 100 euros. El mejor grupo joven resultó ser el Coro Infantil del Colegio Niña María, que obtuvo placa y 250 euros de premio.
La Ronda de Lupiana cerró el acto haciendo un aplaudido bis de su Pobre nació.