La Virgen de la Peña volvió a repartir espliego
01/10/2010 - 09:45
BRIHUEGA
Un intenso aroma a espliego, que desde primera hora de la mañana se había repartido por las principales calles de Brihuega, volvió ayer a envolver a los centenares de vecinos y visitantes que no quisieron perderse la procesión de la Recogida de la Cera, una fiesta de Interés Turístico Provincial con vocación de convertirse en atractivo regional.
El estandarte de la Cofradía de la Virgen de la Peña, que cuenta con cerca de 3.500 cofrades, encabezó una procesión que recorrió apróximadamente siete kilómetros. Portándolo, los jóvenes vecinos que este mismo año han confirmado su fe en Dios mediante el sacramento de la Confirmación. Constituían un grupo de unos 20 muchachos, que se fueron turnando en el importante trabajo de guiar a los fieles por el recorrido por las principales calles de la ciudad, con el punto de inicio en la iglesia. A continuación, como si se tratase de una licencia pagana dentro de un acto esencialmente religioso, marcharon alegres con la comparsa de gigantes y cabezudos, formada por cerca de 18 ejemplares, atrayendo principalmente la atención de la chiquillería del municipio, que correteaba al paso de estos personajes. Entre ellos, destacaron nuevamente los que simbolizaban al Al Mamum y a su hija, la princesa Elima, quienes, junto con los dos viejos alcarreños, no cesaron de demostrar sus dotes bailando al ritmo de las notas de la Banda Municipal de Música, que siguieron la procesión al completo. En último lugar, los ocho miembros de la Junta Directiva de la cofradía cerraron una comitiva que durante algo más de hora y media sembraron con alegría y devoción cada rincón del municipio con una mezcla inusual de fervor y diversión.
Al son de la música
Al finalizar la procesión, el Prado de Santa María se convirtió en un escenario improvisado para los bailes de los gigantes y cabezudos, que fue muy bien recibido tanto por los más pequeños como por los mayores que los acompañaban. Este acto religioso es el cogollo de las fiestas, además de su inicio, de ahí que queramos que sea declarado de Interés Turístico Regional, explica Abelardo Mazo, miembro de la Junta Directiva y teniente alcalde del Ayuntamiento, donde ya se está recopilando toda la documentación necesaria para iniciar los trámites. Si no es la primera procesión de España, seguro que es la segunda, recalca Abelardo, quien no faltó a una cita en honor a la patrona del municipio, la Virgen de la Peña.
Al son de la música
Al finalizar la procesión, el Prado de Santa María se convirtió en un escenario improvisado para los bailes de los gigantes y cabezudos, que fue muy bien recibido tanto por los más pequeños como por los mayores que los acompañaban. Este acto religioso es el cogollo de las fiestas, además de su inicio, de ahí que queramos que sea declarado de Interés Turístico Regional, explica Abelardo Mazo, miembro de la Junta Directiva y teniente alcalde del Ayuntamiento, donde ya se está recopilando toda la documentación necesaria para iniciar los trámites. Si no es la primera procesión de España, seguro que es la segunda, recalca Abelardo, quien no faltó a una cita en honor a la patrona del municipio, la Virgen de la Peña.