La vuelta de Kabul ¡Bravo GEO!

La difícil situación recreada en Afganistán tras la vuelta al poder de los Talibanes ha hecho que colaboradores internacionales, personal diplomático y seguridad de los países con representación allí hayan protagonizado una tensa y peligrosa retirada y evacuación de buena parte del personal nativo que ha estado colaborando con el intento de años de una reconstrucción democrática, ahora tornada de momento rota, del país afgano. Aunque el sabor es agridulce por la situación y por haber sido imposible evacuar a todos los que hubieran deseado, los militares, policías y guardias civiles españoles han desarrollado su misión con gran profesionalidad y dignidad, en una situación muy complejas. 

Sabrán los lectores de Nueva Alcarria que un servidor no se dedica profesionalmente al periodismo (las artes marciales han sido mi ocupación durante casi medio siglo), pero sí que tengo la oportunidad de vez en cuando de dar rienda suelta a mi corazón en temas que me llegan al alma y sobre los que me desahogo negro sobre blanco. Por ello quiero que estas líneas sean un especial reconocimiento en este caso a unos efectivos que a Guadalajara nos tocan de cerca y que son orgullo para la ciudad, el Grupo Especial de Operaciones (GEO) del Cuerpo Nacional de Policía, algunos de cuyos operativos acaban de regresar de Kabul, donde han estado realizando sus misiones de seguridad y protección a la Embajada de España (como habitualmente realizan en otras de nuestras sedes diplomáticas  en países de riesgo). 

Hasta el último momento estos miembros del  GEO han trabajado con eficacia en su cometido y más allá de él, ayudando en la evacuación de españoles y de personal afgano colaborador allí de nuestra embajada y otras. Han vuelto a demostrar su preparación física, táctica y mental, y ya son… incontables sus delicadas acciones dentro y fuera de nuestra piel de toro. La alta discreción es punto importante en sus misiones, pero ya que esta vez han salido a la palestra y ha habido eco de su regreso, quiero aprovechar aquí para darles la bienvenida a la que es su casa y felicitarles y agradecerles su trabajo.

En varias ocasiones he escrito sobre el GEO en revistas especializadas en artes marciales, ya que estas forman parte de su entrenamiento habitual junto a un sinfín de materias, técnicas y tácticas de todo tipo, que los prepara para las intervenciones policiales de alto riesgo que desde su creación en 1978 la unidad ha desempeñado. Los primeros tiempos de su historia, al mando del capitán Ernesto Quijada, más tarde fallecido en accidente y sustituido en la cúpula por el capitán Juan Senso, eran años de instauración. SSMM los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía acuden en marzo de 1979 a Guadalajara para entregar sus diplomas a los 58 policías de la 1ª promoción del GEO, en el acuartelamiento inaugurado un año antes por el Inspector, General Timón de Lara, de la Policía Armada, y donde hoy día permanecen (aunque ya está previsto para los próximos años otro más acorde ya con nuevos requerimientos en su modernización. Meses más tarde, en diciembre de aquel mismo 1979, el Rey Don Juan Carlos volvería para la entrega de diplomas de la 2ª promoción. Con el paso de los años SM el Rey Don Felipe también apoyará al GEO con sus visitas al cuartel, en Guadalajara, primero como Príncipe de Asturias en Abril de 1998,… y recientemente ya como monarca. Mientras tanto, el comandante y luego comisario Carlos Holgado, y los comisarios Rafael González Cachinero, Félix Antolín y Javier Nogueroles (en la actualidad) han mandado tan prestigiosa unidad policial.

Hay que decir que en estos 43 años de actividad del GEO la palabra efectividad es la que mejor define el historial de este compacto equipo humano, altamente cualificado, dispuesto a intervenir en cualquier momento y circunstancia.  Innumerables comandos terroristas armados neutralizados y acciones de toma de rehenes (con liberados ilesos), gran número de delincuentes peligrosos detenidos, numerosas embajadas españolas en el extranjero a las que en diversos momentos se ha dado protección (como la de Kabul que mencionamos hoy), intercambios y entrenamientos conjuntos con grupos especiales como el  GSG-9 alemán, el  SAS. británico o el HRT del FBI norteamericano, formación de unidades especiales de numerosos países, etc… son algunos de los frutos de esta unidad, aunque no puedo dejar de lamentar también la baja del Sub Inspector Javier Torronteras, fallecido en la explosión suicida de los terroristas de 2004, en Leganés, a quien quiero por supuesto también reconocer en este improvisado homenaje al grupo.

Por mi parte, desde principio de los años 80 he mantenido mi particular relación con el GEO a través de miembros del grupo que a título particular han querido complementar sus prácticas con las artes marciales, el Karate concretamente, que durante tantísimos años he desarrollado en Guadalajara. En otras ocasiones han sido a sus hijos a los que me han traído para que instruyera en mi disciplina. Muchos son los casos concretos, lo que unido a otras cuestiones más personales, hace que mi cariño hacia el GEO haya sido siempre, durante tantos años, notable. Por ello siento especial orgullo de su buen hacer, en este caso en Kabul, y me alegro de que con la misión cumplida dentro de las posibilidades que la situación ha permitido, hayan regresado a nuestra Guadalajara, a su ciudad, con sus familias. 

Hoy quiero hacer extensivo mi agradecimiento, reconocimiento y gratitud no solo a los operativos actuales sino a los que lo han sido en algún momento de su historia. Igualmente a los miembros de apoyo del GEO que hacen que los operativos puedan llevar a cabo sus misiones con éxito. Cada uno desde su puesto conforma un engranaje que funciona a la perfección.  ¡Enhorabuena!