Lamata enseña en Guadalajara las ventajas de la futura Ley de Servicios Sociales

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: BEATRIZ PARIENTE
La nueva Ley de Servicios Sociales de Castilla-La Mancha que prepara el Gobierno de Castilla-La Mancha garantizará la protección social como derecho de la ciudadanía, así como la calidad de cada prestación reconocida por la futura norma. Con la ley, se regulará con claridad el derecho a una información completa de los servicios sociales, la consolidación de la tarjeta social y la posibilidad de que se le asigne un profesional de referencia que coordine su plan individual de atención social, entre otros aspectos.
El consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata, visitó Guadalajara para mantener un encuentro con los trabajadores sociales que, tal y como él mismo definió, trabajan “en la trinchera, en la primera línea, atendiendo a las personas con más necesidades”. De hecho, la misión de estos profesionales es detectar los problemas de exclusión, de pobreza y de necesidad de la población, canalizando las asistencia y los programas públicos que existen para atajar estas situaciones de dificultad.
A todos ellos, el consejero les presentó el anteproyecto de la Ley de Servicios Sociales, cuyo propósito será “consolidar su trabajo a través de la creación de un sistema público de servicios sociales de Castilla-La Mancha” que definirá los derechos de las personas a la atención de los servicios sociales, el catálogo de prestaciones existentes y su garantía de acceso, así como la organización de los servicios sociales a través de un sistema coordinado que enlazará la Atención Primaria, la Atención Especializada y los servicios sociales. Así, por ejemplo, se creará la historia social, la tarjeta social –identificación de la persona e historial de sus diferentes atenciones, al estilo de una historia médica– y la figura del gestor del caso, “una persona que se encargará de orientar a la persona en los diferentes programas en los que participe”.
La futura Ley de Servicios Sociales es fruto del trabajo que el Gobierno de Castilla-La Mancha está llevando a cabo con asociaciones, entidades públicas y privadas, ayuntamientos y profesionales del ámbito social; de ahí la importancia del encuentro celebrado ayer en Guadalajara.
El encuentro sirvió, además, para que los profesionales aproximaran a Lamata sus inquietudes y dudas profesionales. Por ejemplo, preguntaron que cómo quería la administración que se les motivara en su trabajo si se les bajaba el sueldo. A este respecto, Lamata respondió que “les he comentado que la situación económica es difícil, hay una crisis, los ingresos han bajado, la capacidad de hacer políticas públicas también ha disminuido y se plantea un esfuerzo adicional, un sacrificio”. Por ese motivo, Lamata sugiere como fórmulas para resolver la crisis la lucha contra el fraude fiscal, reforzando los servicios de inspección, así como la generación de ingresos a través de los tipos impositivos de las rentas más altas. “Las medidas que ha tomado Zapatero son las mismas que yo hubiera tomado”, agregó el consejero, quien consideró que aún se podrían obtener más ingresos si se rescataran los 60.000 millones de euros de fraude fiscal.
Respecto a las modificaciones en la Ley de Dependencia, Lamata indicó que, en principio, no afectará a los 15.000 castellano-manchegos que están tramitando en estos momentos sus solicitudes puesto que podrán resolverse en los próximos seis meses.