Las antiguas Reinas y Damas de Honor de las fiestas de Guadalajara

14/09/2025 - 13:52 Eduardo Díaz

 En el año 1966 el alcalde de Guadalajara, Felipe Solano Antelo, implantaba la figura de la Reina de Ferias y Fiestas de Guadalajara acompañada por su corte de Damas de Honor.

  La primera señorita en llevar la Banda Oficial de Reina de las Ferias y Fiestas fue Blanca Rosa Ibarra Aranda, hija de Luis Ibarra Landete, que en esa época era el gobernador civil de Guadalajara. El solemne acto de la proclamación de la Reina de las Fiestas fue en el salón de plenos del Ayuntamiento de Guadalajara, actuando como Mantenedores de la Reina los poetas locales José Antonio Ochaita y José Antonio Suárez de Puga.


  Las principales funciones de la Reina de las fiestas, acompañada de sus Damas de Honor, era la de presidir el desfile de carrozas inaugural de las fiestas, acompañar a las autoridades municipales en los principales actos festivos y asistir a los festejos taurinos, tras pasear antes del inicio de la corrida de toros en vehículos descapotables para saludar al público asistente.
   El año cumbre de la elección de la Reina de las Fiestas de Guadalajara llegó en 1967, cuando fue elegida Reina de las Fiestas Mariola Martínez- Bordiú Franco, nieta del Generalísimo Francisco Franco. En la elección de Mariola influyó el que pasase sus descansos estivales en una residencia familiar junto al embalse de Entrepeñas. El acto principal de las fiestas de ese año 1967 fue el desfile de carrozas, presidido por Mariola en una carroza municipal, lo que provocó que a la ciudad arriacense llegasen numerosos redactores y fotógrafos de la prensa del corazón como Semana, Hola y Lecturas. El broche final a las fiestas lo puso el alcalde Antonio Lozano Viñés con una cena y posterior baile de gala a la que acudieron los marqueses de Villaverde y numerosos ministros que prometieron fuertes inversiones en la ciudad de Guadalajara. Una de las primeras promesas en hacerse realidad  fue la llegada de la Escuela de Enfermería a un edificio contiguo de la antigua Residencia de la Seguridad Social, en la llamada calle de la División Azul que hoy tiene el nombre de calle Ferial. Esta escuela fue inaugurada por Miguel Moscardó Guzmán, en aquel momento gobernador Civil de Guadalajara. 


   A partir de 1976 las autoridades municipales decidieron que había llegado el momento de dar paso a jóvenes de Guadalajara para que fuesen Reinas de las Ferias y Fiestas de Guadalajara y sustituyesen a hijas de ministros, militares e incluso a descendientes femeninas de alcaldes de Madrid. Para los amantes de las estadísticas, la primera Reina de las Ferias y Fiestas de Guadalajara fue la guadalajareña María Antonia de Lucas Centenera. Año tras año cedían su banda a jóvenes arriacenses. Esta tradición de Reinas y Damas de Honor se mantuvo en Guadalajara hasta el año 2006, siendo María Cruz De Agustín, la última que tuvo la banda de Reina de las Fiestas y que ponía el fin a una tradición de veintisiete años de historia.