Las elecciones al Colegio de Médicos se anulan por 310 votos por correo supuestamente sin remite

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
Trescientos diez votos se han convertido en el objeto de la polémica en el seno del Colegio Oficial de Médicos de Guadalajara. El secretario de la mesa electoral decidió declarar la anulación de las votaciones emitidas el pasado viernes al considerar que se habían recibido “310 votos por correo sin remitente” y que, además, se habían introducido algunos votos por correo “por error” en las urnas. Por su parte, el candidato a la presidencia Ramón Ochoa ha denunciado los hechos ante la Policía Nacional y la Organización Médica Colegial y considera que “no está dispuesto a que tomen el pelo a 450 electores” y da fe de que existe certificación postal de 306 votos por correo, de los que aporta justificación.
El pasado viernes 30 de abril el Ilustre Colegio Oficial de Médicos (COMG) celebró elecciones para renovar la Junta Directiva. Las puertas del Colegio permanecieron abiertas desde las 10.00 de la mañana hasta las 18.00 horas, pero el proceso electoral tuvo que ser anulado por la mesa electoral, constituida de acuerdo a los Estatutos del Colegio, según han señalado desde el propio COMG, por “la recepción de 310 votos por correo sin remitente”. Este hecho habría provocado la anulación exclusiva del voto por correo, pero tal como figura en el acta electoral “se introdujeron por error en las urnas votos remitidos por correo” en el momento del recuento, por lo que se procedió a anular el proceso completo de elecciones, según señalan desde el propio Colegio.
De acuerdo a sus estatutos, en su artículo 1.10.2, “estos sobres especiales (refiriéndose a los del voto por correo) se remitirán por correo certificado y con antelación suficiente al secretario del Colegio, dentro de otro en el que figurará de forma destacada la palabra Elecciones. Abierto el sobre exterior y previo reconocimiento de la firma por el secretario, éste custodiará sin abrir los sobres especiales hasta el momento en que finalice la votación personal, en que los pasará a la mesa electoral, procediendo entonces el presidente a su apertura y a depositar los votos en las urnas.”
En el momento del recuento de los votos por correos, el secretario del Colegio, Juan Antonio Fernández Echevarría, encargado de validar los votos por correo según los estatutos del Colegio, manifestó que el pasado 29 de abril recibió de la empresa postal 310 sobres sin remitente, en los cuales figuraba la palabra Elecciones por correo certificado donde no constaba el remitente, por lo que no se pudo identificar al elector.
El secretario consideró que no se había respetado una de las exigencias de necesaria identificación en el procedimiento electoral, concretándose el déficit de garantía que incidió y supuso una irregularidad en el ejercicio del voto, para ciertos electores.
Según figura en el acta de las elecciones, elaborada por la mesa electoral, “vistas las incidencias con el voto por correo y dado que se han introducido por error en las urnas votos remitidos por correo, acordamos por unanimidad la anulación de las votaciones emitidas el día de hoy –29 de abril–”.
“Las urnas del voto presencial están precintadas en la sede del colegio, así como todos los votos por correo. Todos ellos están custodiados por el secretario”, figura en un comunicado oficial del Colegio de Médicos.
Por su lado, el aspirante a ocupar la presidencia del organismo colegiado Ramón Ochoa –que compite con Ricardo Ginestal– considera que “las elecciones no se han anulado, sino que no han llegado a celebrarse”, al entender que esas 310 papeletas “no se anulan porque haya votos ilegales, que no sé si los hay, nuestros no, lo que se anula es cada voto. Lo que se anula es cada voto ilegal, pero no las elecciones”. De hecho, Ochoa señala que “habrá que demostrar lo que se ha certificado y lo que no y habrá que hacer recuento. Tendrá que intervenir no sé si la Organización Médica Colegial –los árbitros de todos los médicos–, que ya lo hemos puesto en su conocimiento, el juzgado o quién, pero nosotros no”. Ochoa señala que las papeletas “sí llevaban remitente, como puedo demostrar documentalmente, y si no Correos no hace un envío si no se encarga alguien de remitirlo y de pagarlo”. De hecho, el candidato aportó a esta redacción la copia de la denuncia interpuesta ante la Comisaría de Policía Nacional y los resúmenes de las certificaciones postales. En dicha denuncia, además, aporta también copia de dichos certificados compulsados por él mismo. Para Ochoa, para averiguar la pertenencia de esos votos “es necesario abrir los sobres” y considera que no está “dispuesto a que tomen el pelo a 450 electores”.
El candidato opina que las elecciones no deberán repetirse, como sugieren desde el COMG, sino que tendrá que estudiarse qué es lo que ha sucedido y llegar a una determinación.