Las nuevas líneas de AVE disparan un 300% los viajeros de Renfe

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Este año se han inaugurado dos nuevas líneas de AVE.	 (Foto: efe)
Por: COLPISA
Valladolid se convierte en un gran centro de distribución de viajeros hacia la zona norte
Las nuevas líneas de Ave, que estos días celebran su primer mes en funcionamiento, han supuesto una auténtica revolución. Los trenes de alta velocidad y los Alvia han ‘robado’ muchos pasajeros a las aerolíneas y han despejado en buena medida las carreteras que unen Madrid con Málaga, y con el resto del corredor norte. Renfe ha aumentado su número de viajeros en algunos destinos hasta un 328% respecto a 2006. Las recientes conexiones abren notables posibilidades a los negocios y el turismo.
Tras años de obras, no exentas de complicaciones, las pasadas Navidades supusieron el inicio de una nueva era para el ferrocarril en España. Los cálculos del Ministerio de Fomento pasan por que los Ave Madrid-Málaga y Madrid-Segovia-Valladolid (cuya construcción costó 2.062 y 3.645 millones, respectivamente) acerquen la alta velocidad a casi 12 millones de ciudadanos. Si se tiene en cuenta el futuro corredor a Barcelona, que se estrenará casi con toda seguridad en la última semana de febrero, la población beneficiada ascenderá a 29 millones de personas. Todas ellas dispondrán de una estación a menos de 50 kilómetros de su hogar. Entre el 24 de diciembre y el 17 de enero, los Ave desplazaron a casi 90.000 viajeros entre Madrid y Málaga, lo que representa una ganancia interanual del 69%. Esos trenes, que ahorran 1:37 horas respecto a los tiempos de 2004, circularon con una ocupación media del 52%, una cifra más que aceptable para el negocio ferroviario, y no muy lejana de la que presenta el ‘veterano’ Madrid-Sevilla. La línea pone la Costa del Sol a sólo dos horas y media de la capital, lo que sin duda supondrá un revulsivo para el turismo de la zona. El tráfico fue, además, muy similar en ambos sentidos con apenas 5.000 clientes más en la ruta hacia la ciudad andaluza. Valladolid, una de las ciudades con más tradición ferroviaria de España, es la otra gran protagonista. Las cifras, en este caso, también son abrumadoras. En este primer mes, 30.064 viajeros han usado el Ave. A la estación vallisoletana llegaron desde Madrid 14.622 personas, algo por debajo de las 16.018 que la usaron como punto de partida hacia Madrid. En este caso, la ocupación media fue del 44%.
Los dos nuevos Ave han transportado ya en 752 trenes a 120.583 viajeros, de los que sólo 4.009 (un 3% del total) llegaron a su destino con retraso. Renfe cuenta con el compromiso de puntualidad más exigente del mundo, y devuelve el 50% del importe o el 100% del billete si la demora supera el cuarto de hora o los 30 minutos, respectivamente.

Centro de distribución
Pero las ventajas no se limitan a la alta velocidad. Los denominados Alvia (trenes de rodadura desplazable, capaces de circular sin parar por vías de ancho ibérico e internacional) han convertido a Valladolid en un enorme centro de distribución de tráfico entre la meseta y el corredor norte. Y es en ese circuito donde Renfe ha logrado enormes incrementos en el número de pasajeros. De media, la mejora en este último mes respecto a 2006 es del 50%. Un porcentaje que se queda pequeño en el caso de, por ejemplo, San Sebastián. Según las cuentas del operador, desde el 23 de diciembre han viajado entre la Bella Easo y Madrid 2.916 personas, lo que supone un repunte interanual del 328%. Cifras insólitas para cualquier medio de transporte. No le va a la zaga el caso de Bilbao, con 1.301 billetes vendidos hacia la capital de España y otros 1.482 en sentido contrario. La suma de ambos sentidos (2.783) representa un alza del 124%.
En el caso de Vitoria, el incremento es del 207%, mientras en el de Palencia se ha pasado de 2.704 a 3.439 viajeros o, lo que es lo mismo, un 27% más. La ruta que pasa por León, Oviedo y Gijón suma en este tiempo 15.771 pasajeros, que significan un aumento del 32% sobre el mismo mes de 2006. Santander, con 7.742 clientes en ambas direcciones, y Burgos (1.343) presentan alzas del 31% y el 70%, respectivamente.

Fiebre ferroviaria
No es extraño el éxito del Alvia, que en muchos casos sustituye a unidades mucho menos cómodas. La principal razón de la ‘fiebre del tren’ es la velocidad. El nuevo sistema logra ahorros de más de una hora en todo el corredor norte. El siguiente paso será la conexión con Francia a través de la denominada ‘Y’ vasca. Y mucho antes que eso, Barcelona. Renfe no ha decidido aún el precio que aplicará a los clientes que lleguen y, sin reserva, se monten en el Ave de la ciudad condal. La tarifa será, en todo caso, considerablemente más barata que la del avión. Las aerolíneas, y en especial Iberia, que tiene en el Puente Aéreo una de sus ‘joyas de la corona’, ya velan armas y preparan el contraataque.

Madrid, 20 ene. (COLPISA, Julio Díaz de Alda).

La puesta en marcha de los Ave a Málaga, Valladolid y Barcelona supone un ambicioso proyecto que, cuando se abra a la competencia en 2010 el tráfico de pasajeros, situará a Renfe con una enorme ventaja dentro del sector. En el corto plazo, sin embargo, los nuevos corredores incrementarán, y mucho, la factura del operador público. Y es que Renfe paga cada año al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) por el uso de las vías y las estaciones, así como por el suministro de energía. Una factura que en 2008 va a aumentar un 35% interanual hasta los 768 millones de euros, según consta en el presupuesto de la compañía.

De esa cantidad, que supone 64 millones al mes, la parte del león (281,6 millones) se la lleva el suministro eléctrico. Un servicio que Adif licita cada año y que después cobra a Renfe. Gas Natural, Centrica, Unión Fenosa y Hidrocantábrico han sido los principales adjudicatarios del contrato para este año, valorado en 204 millones. El simple uso de las vías costará al operador 249, millones, el doble de lo abonado en 2007. Gran parte de culpa de este incremento del 100% la tienen los nuevos Ave.

Junto a la electricidad de tracción de los trenes y el canon por el uso de las vías, Renfe deberá pagar a Adif otros 71,6 millones de euros (un 18,3% más) en concepto de ‘Estaciones’. En este apartado, el gestor cobra al operador por cada pasajero que sube y baja de los trenes, siempre en función de la categoría de las estaciones.

Además, Renfe abonará 165 millones por algunos servicios prestados por Adif como la venta de billetes o el alquiler de locales. Los nuevos operadores ferroviarios, casi todos vinculados a constructoras o a empresas de transporte de viajeros, toman buena nota de las tarifas. Por ahora, los ‘recién llegados’ sólo tienen licencia para transportar mercancías, aunque el negocio llegará en el momento en que se abra la veda para los viajeros. Algunos ya estudian alianzas con la propia Renfe.