Las obras de la N-320 agotan la paciencia de los pueblos próximos

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Durante las horas punta se registran retenciones de varios kilómetros. (Foto: N.IZQUIERDO)
Por: BEATRIZ PARIENTE
El retraso en las obras de la N-320 a su paso por la ciudad, a la altura del Hospital Universitario de Guadalajara, ha colmado la paciencia de varios de los alcaldes de municipios próximos. Localidades como Yebes, Horche, Tendilla o Peñalver consideran que la vía se ha convertido en una “ratonera” en algunos momentos del día. El PSOE ha defendido que la obra es necesaria y que solucionará las retenciones actuales.
El pasado 25 de julio comenzaron las obras de remodelación de la intersección a nivel entre la N- 320 a Guadalajara y el ramal de acceso al Hospital Universitario, con un plazo de ejecución previsto de cuatro meses. El Ministerio de Fomento adjudicó las tareas a la Unión Temporal de Empresas Formada por Imathia, S.L, en un 70 por ciento, y a Construcciones Iglesias S.A, en un 30 por ciento. La actuación tiene por objeto la mejora del acceso de la N- 320 a Guadalajara y el ramal de acceso al Hospital, mediante la depresión de la carretera nacional, permitiendo la circulación sin interrupciones hasta la ciudad, así como el acceso al centro sanitario y eliminando, de este modo, las retenciones circulatorias que se producen en los momentos de mayor tránsito de vehículos. No obstante, la UTE solicitó al Ministerio de Fomento una prórroga de cuatro meses para continuar con las obras debido a varios impedimentos, como las lluvias o el hallazgo de aguas subterráneas con las que no contaban al inicio de los trabajos, según fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
Estos contratiempos han provocado que un proyecto que inicialmente iba a estar ejecutado en cuatro meses lleve más de seis sin concluir su cronograma. Pero lo peor no es la demora, algo más o menos habitual en obras de gran envergadura. La consecuencia más negativa del retraso son los efectos colaterales que está provocando en la propia arteria comunicativa, principal vía de acceso para localidades próximas como Horche, Yebes, Tendilla o Peñalver.
El senador del PP por Guadalajara, Juan Pablo Sánchez, y los alcaldes de Tendilla, Jesús María Muñoz y Peñalver, José Angel Parra, ya han dejado constancia de su malestar por el retraso de las obras en la N-320 a su paso por el Hospital Universitario.Los tres han se hecho acopio de las quejas continuas de los vecinos y usuarios de la N-320 cada vez que se desplazan hasta a Guadalajara por las importantes retenciones circulatorias que se generan como consecuencia de las obras. En algunos casos, estas retenciones se prolongan durante varios kilómetros, sobre todo, en las horas punta de cada comienzo de semana o cuando el trasiego de camiones obliga a paralizar transitoriamente el normal tráfico de la vía.
El senador y los alcaldes del PP recuerdan que “este retraso viene a confirmar algo habitual en el gobierno de Zapatero y en el Ministerio de Fomento que dirige Magdalena Álvarez y que ya ocurrió, por ejemplo, con el puente del Sotillo que se retardó la obra más de dos años de lo inicialmente previsto”.
Además, Juan Pablo Sánchez advierte del peligro que entrañan las obras “no sólo para las conductores sino para los propios trabajadores” por sus deficientes medidas de seguridad, “no se puede tener esa obra sólo con una triste valla metálica de separación, sin acera para los peatones”
El senador critica, además, la esencia de la obra al considerar que no solucionará el colapso circulatorio, sino que trasladará la densidad de vehículos hasta Cuatro Caminos. Asímismo, se remite a un proyecto auspiciado por el Gobierno de José María Aznar como la solución definitiva para este nudo comunicativo, que vinculaba el enlace de la vía al puente de Cabanillas, y se pregunta qué habrá pasado con esta iniciativa. Por estos motivos, Sánchez adelanta que presentará ante el Senado una batería de propuestas para intentar solucionar el problema: “Lo urgente es llevar a cabo ese proyecto que el Partido Popular dejó encima de la mesa. Por eso en el Senado voy a presentar varias iniciativas para que se lleve a cabo esa importante obra y no esta que además de demorarse no es la solución definitiva a los problemas de tráfico de la N-320”.

Defensa socialista
Los parlamentarios nacionales del PSOE por Guadalajara, Jesús Alique y Javier Irízar, han salido al paso de las críticas de los populares argumentando que caen en el “ridículo”, sobre todo, viniendo de un parlamentario directamente implicado en la ejecución del proyecto de la N-320 desde unos inicios que son recordados como “el paradigma de la chapuza del PP” con hundimientos en su trazado en los términos municipales de Horche y Tendilla. Acerca de la defensa de Sánchez del proyecto de Aznar, los parlamentarios recordaron que su Gobierno “tuvo precisamente ocho años para realizar el enlace directo de la N-320 con el nudo de los Faroles y no hizo absolutamente nada”.
Pese a todo, los parlamentarios socialistas matizan que el enlace de la N-320 vendrá de la mano de un proyecto superior, concretamente el de la variante de la A-2 a su paso por la capital. Así como de la conversión, desde esa variante de la A-2, en autovía desde Guadalajara hasta la A-1. Dicho enlace será el que, presumiblemente, resolverá las incorporaciones desde la nacional a la autovía y su continuación hasta la A-1.

Fin a un cruce peligroso
Sobre las obras de la N-320 a su paso junto al Hospital Universitario, el senador socialista Javier Irízar ha defendido unos trabajos que pondrán fin a un cruce peligroso, ejecutado por el PP. “Es por lo tanto una obra absolutamente necesaria tanto desde el punto de vista de la seguridad como de la lógica ordenación del tráfico. El Gobierno ha puesto fin a un problema con estas obras y lo ha hecho en beneficio de los ciudadanos de Guadalajara, facilitando además el acceso a una infraestructura tan importante como es el Hospital Universitario. Se creará una conexión directa con el Hospital, sin depender de ningún cruce, y además en el momento en que se inician las obras del nuevo Hospital”, ha afirmado Irízar.
En esta misma línea, los parlamentarios socialistas han explicado que los retrasos de las obras ya fueron argumentados por la UTE que lleva a cabo las mismas ante los técnicos del Ministerio de Fomento. Una serie de razones entre las que figuran hallazgos imprevistos en el subsuelo y problemas derivados del tráfico (algunos imputables al Ayuntamiento como la celebración de las Ferias junto al centro comercial).
Sobre la seguridad, los parlamentarios socialistas han remarcado que las obras cuentan con un proyecto de seguridad y han señalado que desde el inicio de las obras el número de siniestros en la zona ha sido prácticamente nulo.

Horche y Yebes, los principales damnificados

Independientemente del signo político, es una evidencia que las obras del nudo del Hospital y la N-320 están generando más de un sobresalto a los conductores que diariamente se mueven por esta vía. Las mayores dificultades se produjeron al principio, tal y como recuerdan los vecinos de municipios próximos, como Horche y Yebes, principales afectados. El propio alcalde de Horche, Juan Manuel del Moral, reconoce que la carretera “a veces se convierte en una ratonera y nos cuesta bajar el doble a Guadalajara, sobre todo en hora punta”. Por su parte, la presidenta de la Asociación de Vecinos de Valdeluz, Rosa María Martín, asegura que “esta zona está olvidada y está creciendo muchísimo como para que no se pongan buenas comunicaciones. Hay que recordar que aquí tenemos el AVE y que si queremos que se use debe haber una conexión rápida con la ciudad”. La presidenta vecinal considera que “igual que se garantizan las comunicaciones del Corredor del Henares, debería garantizarse la comunicación de este nuevo corredor que, para nosotros, es el del progreso”.
El pasado lunes, día 12, tras la histórica nevada, aunque ya sin nieve, la vía registró retenciones de hasta cinco kilómetros, provocando que los conductores que tardan diez minutos en hacer el trayecto de entrada a la capital, emplearan 40 minutos en la misma maniobra. La Subdelegación del Gobierno reconoció entonces que, efectivamente, se había detectado un incremento de la densidad del tráfico pero recordó que, la competencia de regulación del tráfico en el nudo del Hospital –entre éste y la gasolinera– corresponde al Ayuntamiento de Guadalajara en virtud de un convenio rubricado el 27 de febrero del pasado año.

El proyecto de obra contempla dos alturas para el cruce

El proyecto de obra del enlace de la N-320 con la ciudad a la altura del Hospital contempla la instalación de pantallas a ambos lados de la calzada deprimida unidas mediante una viga de atado y la realización de un paso superior para el cruce a distinto nivel de dos calzadas, que se apoyará en las pantallas. Los muros pantalla laterales serán de hormigón armado revestido y tendrán una altura variable de 3,5 a 7 metros. Tanto el paso superior como los muros de pantalla se protegerán con pretil metálico. Además, está previsto construir una vía de servicio lateral dotada de carril de deceleración de unos 110 metros de longitud para el acceso al Hospital Universitario y al Tanatorio. Este carril contará con una acera pavimentada con loseta y bordillos de un metro de anchura, que se reincorporará de nuevo a la N-320 a través de un ceda el paso. La obra requerirá la construcción de un muro en ménsula de sostenimiento del desmonte bajo un aparcamiento existente en la margen derecha de la vía de servicio. Por otra parte, se realizará un nuevo vial-concéntrico con vial de giro hacia Guadalajara para el acceso al Hospital desde la N-320, sentido Cuenca, con un ancho de cuatro metros y arcenes de 1 y 1,5 metros.

Para rematar las obras, se sustituirán 25 puntos de luz que se colocarán en disposición bilateral con columnas de ocho metros de altura. Al término de los trabajos se prevé la reposición de las marcas viales, la renovación de la señalización vertical y el balizamiento, según la nueva ordenación viaria, la instalación de barreras metálicas sobre poste tubular y bandas de protección de motociclistas y las correspondientes medidas de integración ambiental.