Las solicitudes para poner una terraza se incrementan entre un 10 y un 15%

  El sector de la hostelería se está preparando para el buen tiempo. El Ayuntamiento ya está recibiendo solicitudes de los bares y restaurantes de la capital para obtener la correspondiente licencia para sacar las terrazas de verano a la calle. El concejal responsable de esta área, Jaime Carnicero, estima que se están presentando entre un 10 y un 15 por ciento más que el año pasado.

  Los motivos pueden ser varios, pero en opinión del concejal los hosteleros buscan rentabilizar su volumen de negocio y además hay calles en las que antes no había espacio para una terraza y, ahora, debido a la remodelación que se ha hecho, sí. Como ejemplos, señala Carnicero, que ahora hay terrazas en la Plaza de Moreno, en el Bulevar de Entrepeñas o en la calle Clara Campoamor. Una terraza de tamaño medio (6 mesas) vendría a costar entre 433 euros, las mejor situadas, y 60 euros por temporada, que suele estar entre mayo y septiembre, aunque fluctúa mucho en función del tiempo. El precio depende de los metros cuadrados que ocupe y el tipo de calle donde esté ubicada.

  La Ordenanza fiscal reguladora de la tasa por ocupación de terreno de uso público con mesas y sillas con finalidad lucrativa diferencia entre cuatro tipos de vías: parques, plazas y paseos y calles de primera, segunda o tercera categoría. Las tasas en vigor son las aprobadas en el pleno municipal de diciembre del año pasado y van desde los 3,62 euros por metro cuadrado y mes de las terrazas que están en parques, plazas y paseos hasta los 0,48 de las calles de menor rango.

  En el último pleno celebrado por el Ayuntamiento, se aprobó una nueva Ordenanza administrativa sobre terrazas y otras instalaciones especiales con finalidad lucrativa al aire libre desarrollada por establecimientos de restauración y hostelería que surge con el fin de recoger las sugerencias de los profesionales del sector y dar respuesta a algunos problemas detectados por los técnicos en la normativa vigente hasta el momento, que data de 2010. El concejal señala que el Ayuntamiento intenta facilitar la generación de riqueza, porque dada la actual situación económica, “tenemos que poner nuestro grano de arena”.

  En cuanto al horario, se mantiene el actual. De abril a septiembre, las terrazas pueden permanecer abiertas desde las 9.00 hasta las 24.00 horas, ampliándose el horario de cierre hasta las 1.30 los viernes y vísperas de festivos. De octubre a marzo se adelanta una hora el cierre. No obstante, el Ayuntamiento podrá aumentar y/o restringir este horario en zonas concretas o períodos del año determinados, o de forma general, siempre bajo criterios objetivos y motivados.

  Una vez superado el horario de cierre, no deberá haber clientes en las terrazas y el establecimiento procederá de manera inmediata a su adecentamiento, establece la ordenanza. La modificación de la normativa en el pleno estuvo precedida del debate sobre la posibilidad de que los bares y restaurantes tuvieran que pagar por ocupación de la vía de las mesas altas o barriles que han colocado a las puertas del establecimiento para uso de los fumadores. El concejal ha desmentido tal extremo, señalando que no se va a cobrar por eso.