Llamazares resiste la presión del PCE para que dimita de inmediato
01/10/2010 - 09:45
Por: COLPISA
Gaspar Llamazares soportó la presión de los miembros del Partido Comunista de España que forman parte de la comisión permanente de IU y que exigían su renuncia inmediata al cargo de coordinador general tras el fracaso electoral del pasado domingo.
La reunión de tres horas de la comisión permanente de IU de ayer fue un capítulo más en la historia de enfrentamientos entre el PCE y el sector renovador de IU que respalda a Llamazares. Los comunistas, capitaneados por su secretario general, Francisco Frutos, reclamaron con fuerza la dimisión fulminante de Llamazares por los malos resultados en los comicios. El todavía coordinador general de la coalición rechazó esa posibilidad y recordó que el compromiso que adquirió el domingo por la noche fue no optar a la reelección y que, por tanto, dejará el cargo tras la Asamblea General de la coalición.
La comisión permanente aprobó por 17 votos a favor y cinco abstenciones una resolución, en la que se reconoce que los resultados electorales fueron claramente insatisfactorios. El texto señala que la mejor manera de hacer frente a esta situación es dar la voz a los afiliados y afiliadas en una asamblea general para que su protagonismo sea decisivo en la búsqueda de soluciones, alternativas y construcción de nuevos equipos.
La resolución considera que la próxima asamblea deberá ser la que relance el proyecto político de IU, que debe ser de izquierdas, federal, alternativa y transformadora. El nuevo equipo de dirección, añade el texto, deberá tener capacidad político, con compromiso y con una voluntad clara de dinamizar la organización, vincularse a los movimientos sociales y estimular el pensamiento crítico.
La comisión permanente acordó también crear un grupo de trabajo, del que no formará parte Llamazares, para pilotar el proceso de relevo, que culminará con la elección de un nuevo coordinador general en la asamblea que celebrará IU antes del verano.
La comisión permanente aprobó por 17 votos a favor y cinco abstenciones una resolución, en la que se reconoce que los resultados electorales fueron claramente insatisfactorios. El texto señala que la mejor manera de hacer frente a esta situación es dar la voz a los afiliados y afiliadas en una asamblea general para que su protagonismo sea decisivo en la búsqueda de soluciones, alternativas y construcción de nuevos equipos.
La resolución considera que la próxima asamblea deberá ser la que relance el proyecto político de IU, que debe ser de izquierdas, federal, alternativa y transformadora. El nuevo equipo de dirección, añade el texto, deberá tener capacidad político, con compromiso y con una voluntad clara de dinamizar la organización, vincularse a los movimientos sociales y estimular el pensamiento crítico.
La comisión permanente acordó también crear un grupo de trabajo, del que no formará parte Llamazares, para pilotar el proceso de relevo, que culminará con la elección de un nuevo coordinador general en la asamblea que celebrará IU antes del verano.