Los bancos y las cajas admiten que lo peor está por llegar

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: COLPISA
Lo ha advertido Jaime Caruana, ex gobernador del Banco de España, la persona que mejor conoce la posición real de las entidades españolas porque, desde su puesto de supervisor, impuso la realización de lo que llamó ‘reservas estadísticas’. Bancos y cajas han tenido que destinar en los últimos años de bonanza cuantiosos fondos –la cifra acumulada supera los 35.000 millones de euros- de forma voluntaria y en previsión de que llegaran peores tiempos.
Las cuentas que bancos y cajas van a presentar las próximas semanas, con datos del primer trimestre, muestran una desaceleración del crédito y ligero repunte de la morosidad. Los resultados se resentirán, en ciertos casos, por el compromiso con promotores en dificultades, y en los balances de otras instituciones aparecerá algún reflejo de los problemas de liquidez padecidos, si bien los saldos todavía evolucionarán de acuerdo a lo previsto, con un aumento medio por encima del 10%. Pero las entidades ya admiten que lo peor está por llegar. El brusco empeoramiento de la situación económica supone un frenazo de la actividad que se dejará sentir en los ganancias del próximo ejercicio.

Hace ya un par de años que, temiendo la ralentización del sector inmobiliario, los bancos y las cajas, pero sobre todo los primeros, reorientaron el esfuerzo comercial de sus redes hacia las pequeñas y medianas empresas y, en el negocio de particulares, se inclinaron por potenciar los créditos al consumo y la fidelización de los clientes.

Lo importante ahora es retener y conquistar a usuarios que contraten con la entidad el mayor número posible de productos. Desde las compras con tarjeta al seguro médico, pasando por la gestión de la cartera o el simple depósito de acciones, todo deja un margen que, acumulado, hace cada vez más rentable la prestación de servicios.

Así se explica que –en momentos de sequía crediticia- se estén produciendo algunas ofertas hipotecarias que, aisladas, debieran arrojar pérdidas para la entidad que las formula. No es el caso de la propuesta formulada por BBVA para los más jóvenes –hipotecas al Euríbor menos 0,25 puntos- porque el banco ya ha explicado que cargará esta diferencia en el capítulo de sus acciones de responsabilidad social corporativa. Pero en las iniciativas a precios muy ligeramente superiores al Euríbor, la ganancia vendrá de los requerimientos que acompañan a la concesión del préstamo.

En cadena

Bancos y cajas persiguen la mayor vinculación de los usuarios mientras comprueban que su actividad se frena. De momento, la paralización en seco de la compra de viviendas en el mercado libre no se ha trasladado en igual medida a los préstamos hipotecarios porque las operaciones que ahora se realizan son las que corresponden a viviendas construidas en los últimos 36 meses. Pero, a medida que transcurra el tiempo, las hipotecas irán a menos. Sobre todo si, como parece evidente, se ha cerrado el grifo de la financiación al promotor ante el exceso de oferta.

El efecto de la desaceleración económica se dejará sentir en cadena. La estrategia bancaria de orientar el negocio hacia las pequeñas y medianas empresas y el crédito al consumo se resiente. En las empresas suministradoras del sector del ‘ladrillo’: las ventas de electrodomésticos de línea blanca –frigoríficos, lavadoras, lavavajillas- han caído en torno al 30% en el primer trimestre, porque su principal cliente son las constructoras.

Y se empiezan a escuchar las manifestaciones de preocupación de sociedades del sector de la distribución. Incluso Ikea vende menos porque hay menos casas que ‘redecorar’. Para la banca, eso significa además que el crédito al consumo no va a seguir tomando el relevo de la financiación hipotecaria.

En las transacciones con tarjeta, muchos clientes se han visto sorprendidos en los últimos meses por la subida de comisiones en el uso del ‘dinero de plástico’. Las entidades tratan de amarrar las ganancias en esta parcela de negocio donde, por otra parte, la desaceleración económica se traduce en aumento de la cifra de impagados.

‘Choque’ económico

Lo ha advertido Jaime Caruana, ex gobernador del Banco de España, la persona que mejor conoce la posición real de las entidades españolas porque, desde su puesto de supervisor, impuso la realización de lo que llamó ‘reservas estadísticas’. Bancos y cajas han tenido que destinar en los últimos años de bonanza cuantiosos fondos –la cifra acumulada supera los 35.000 millones de euros- de forma voluntaria y en previsión de que llegaran peores tiempos.

En la presentación del Informe sobre Estabilidad Financiera Global del FMI, Caruana, que ahora desempeña la dirección del departamento de estudios monetarios de este organismo, explicó que .-al no haber operado con productos contaminados, como las hipotecas ‘basura’ norteamericanas- el primer ‘choque’ vendrá para el sistema financiero español por la vía del ajuste económico y no por problemas de estabilidad. La situación se complicará –apuntó- cuando se produzcan efectos ‘de segunda vuelta’ , porque aumenta el paro y la economía se deteriora. A esa situación temen los bancos y cajas y con esa perspectiva preparan su estrategia.