Los cacos vuelven a la acción robando 23 gallinas a un vecino de Saúca

01/12/2018 - 13:50 M.Pérez

Parece que los amigos de lo ajeno no cesan en su objetivo de atacar a los municipios cercanos a la A2 del norte de la provincia. Si a principios de semana hablábamos del atraco a varios establecimientos de Anguita, ahora, lo hacemos de Sáuca. Esta mañana se ha conocido que durante la noche se han llevado 23 de las 24 gallinas que un vecino tenía en su pequeño corral. ¿Y para qué querrán los ladrones las gallinas? Los vecinos se muestran incrédulos ante la forma de operar de los ladrones. "Les vale todo", reconocía el alcalde de la localidad, Eduardo Álvarez, que indica que en el último semestre el pueblo ha sido "asolado" por los cacos. "Con lo de Alcolea, nuestro caso ha quedado en segundo plano, pero somos el municipio donde más han repuntado los robos", explica. Primero fue el edificio consistorial, "lo destrozaron para no llevarse nada", dice el regidor; después fue el depósito del agua, "eso sí que es peligroso porque no sabes con qué intención accedieron, nos pudieron envenenar", reflexiona. "Los tres bares de la localidad, el Motel Saúca, la cafetería de la fábrica de carne de caza y El Cercao, también dos naves agrícolas, un casa particular y, ahora, las gallinas", enumera con pesar. "En un radio de ocho kilómetros están haciendo lo que quieren", explica Eduardo Álvarez, refiriéndose a los pueblos vecinos de Anguita, Alcolea, y el que preside, Saúca. En una reunión reciente con el subdelegado del Gobierno, Ángel Canales, sobre la situación que viven, concidieron en que la rápida salida que tienen los ladrones de esta zona, por la A2, "es algo con lo que juegan a su favor". Respecto a las soluciones, el aumento de efectivos de la Guardia Civil, es algo que, por ahora, "está complicado". "El subdelegado nos advirtió que la falta de Presupuestos lo paraliza todo y, aunque los hubiera, mientras se aprueban las nuevas plazas, se convocan, opositan y forman, nos vamos a tres años mínimo", relata. El alcalde asegura que no cesarán en su empeño de mejorar la seguridad de sus pueblos, "nos concentraremos el día 8 e iremos donde tengamos que ir para que nuestros pueblos estén seguros". Lamenta, sin embargo, que mientras se toman soluciones, "alguien pueda cometer una locura y tomar la justicia por su mano. La gente está harta", termina Álvarez.