Los celiacos de Guadalajara aprenden a elaborar ocho recetas sin gluten
01/10/2010 - 09:45
Por: ANTONIO PAPELL
Si cada vez son más las personas que viven pendientes de lo que comen, aún tienen mayor interés aquéllas que sufren trastornos del sistema digestivo como los celiacos, cuyo intestino delgado sufre intolerancia al gluten. Por este motivo, desde la Asociación de Celiacos de Guadalajara se organizó ayer el segundo taller de cocina dirigido a celiacos a cargo del cocinero experto en este tipo de alimentación, Diego Pérez. Cerca de 30 personas pudieron aprender a elaborar ocho platos de diferentes dificultades.
Izcocho de coco, crema catalana, galletas mantecadas, potaje de garbanzos con espinacas y rellenos, torrijas de leche, gozua, empanada de carne y rollos fritos fueron las ocho recetas que se elaboraron, paso a paso, en el taller de cocina organizado por la delegación alcarreña de la Asociación de Celiacos de Castilla-La Mancha (ACCLM).
La delegada de la asociación en Guadalajara, Lilia Vinuesa, argumentaba que es fundamental que las personas celiacas aprendan a preparar sus propios platos porque van a tener que cocinar mucho en casa. Los productos de las tiendas, como el pan o la pasta para pizza pueden hacerlos si aprenden a cogerle el punto a la harina de trigo. Sin embargo, aunque no es necesario tener el nivel de maestría del profesor de cocina Diego Pérez, llegado expresamente desde la Escuela de Hostelería de Albacete a impartir la clase, sí es cierto que la harina de trigo requiere de, al menos, paciencia y experiencia para que los platos gusten al paladar. No es una harina que deje los platos esponjosos, así que hay que jugar un poco con otros ingredientes, como los huevos, para conseguir el toque.
La delegada, que cumple un año en este cargo, aseguró que durante este tiempo el trabajo de la asociación ha sido incesante, como lo prueba la multiplicación del número de socios. En los últimos meses han pasado de siete a 60 asociados, lo que colma de satisfacción a quienes dirigen el colectivo. En la actualidad, han conseguido ponerse a disposición de los celiacos o de todo aquel que desee informarse durante dos horas, de 18.00 a 20.00, todos los lunes en el centro social de La Amistad. De lunes a jueves es posible contactar con la asociación de 17.00 a 20.00 horas en el teléfono 687 47 80 83.
La prevalencia de esta enfermedad se sitúa en el uno por ciento de la población pero el diagnóstico sigue dejando que desear, apunta Vinuesa. En Guadalajara, existen entre 300 y 400 personas diagnosticadas que, según ella, en muchos casos han tardado mucho tiempo en averiguar lo que tenían porque se confunde con otras dolencias.
La delegada de la asociación en Guadalajara, Lilia Vinuesa, argumentaba que es fundamental que las personas celiacas aprendan a preparar sus propios platos porque van a tener que cocinar mucho en casa. Los productos de las tiendas, como el pan o la pasta para pizza pueden hacerlos si aprenden a cogerle el punto a la harina de trigo. Sin embargo, aunque no es necesario tener el nivel de maestría del profesor de cocina Diego Pérez, llegado expresamente desde la Escuela de Hostelería de Albacete a impartir la clase, sí es cierto que la harina de trigo requiere de, al menos, paciencia y experiencia para que los platos gusten al paladar. No es una harina que deje los platos esponjosos, así que hay que jugar un poco con otros ingredientes, como los huevos, para conseguir el toque.
La delegada, que cumple un año en este cargo, aseguró que durante este tiempo el trabajo de la asociación ha sido incesante, como lo prueba la multiplicación del número de socios. En los últimos meses han pasado de siete a 60 asociados, lo que colma de satisfacción a quienes dirigen el colectivo. En la actualidad, han conseguido ponerse a disposición de los celiacos o de todo aquel que desee informarse durante dos horas, de 18.00 a 20.00, todos los lunes en el centro social de La Amistad. De lunes a jueves es posible contactar con la asociación de 17.00 a 20.00 horas en el teléfono 687 47 80 83.
La prevalencia de esta enfermedad se sitúa en el uno por ciento de la población pero el diagnóstico sigue dejando que desear, apunta Vinuesa. En Guadalajara, existen entre 300 y 400 personas diagnosticadas que, según ella, en muchos casos han tardado mucho tiempo en averiguar lo que tenían porque se confunde con otras dolencias.