Los consistorios ya pueden realizar contrataciones conjuntas con Diputación

La Diputación de Guadalajara ha puesto en marcha su Central de Contratación de obras, servicios y suministros. El objetivo es facilitar a los municipios de Guadalajara la gestión de sus contrataciones a una escala mayor que la que se puede lograr de manera autónoma, lo que significa un correspondiente ahorro económico. 

El presidente provincial, José Luis Vega, acompañado de la vicepresidenta quinta y diputada delegada de Economía y Hacienda, presentó este miércoles este nuevo servicio, abierto a todos los ayuntamientos de la provincia, pero que resultará más beneficioso sobre todo a los más pequeños. “Todos sabemos de las dificultades que tienen los municipios más pequeños para gestionar los contratos, dado que cuentan con pocos medios humanos y el secretario municipal a lo mejor va sólo una vez por semana”, señaló Vega. 

Entre las ventajas de esta Central de Contratación estará, tal y como enumeró el presidente provincial, “el ahorro económico para las arcas del estado, en el tiempo de la tramitación, mayor seguridad jurídica y garantizada autonomía”. Porque, insistió Vega, los consistorios serán los que decidan si quieren sumarse o no a los diferentes acuerdos marco.

El primer acuerdo marco de esta Central de Contratación entró en vigor precisamente el miércoles para el suministro de combustible de los vehículos a motor con los que cuenten los consistorios. Éstos pueden sumarse con un acuerdo del pleno municipal y, desde ese momento, entrarán a formar parte de la Central de Contratación de Diputación. Este primer contrato de combustible supondrá, según apuntó Vega, un ahorro de entre 10 y 11 céntimos el litro “cuando vayan a repostar a las estaciones de servicio contratadas por Diputación”. Eso, insistió, “sin romper la autonomía de los ayuntamientos”. 

La Central de Contratación se articulará a través de dos líneas. En primer lugar, en el acuerdo marco, la Diputación ha licitado y establecido previamente con los proveedores seleccionados las condiciones de adquisición del suministro en cuestión, que son iguales para todos los ayuntamientos adheridos. En segundo lugar está el sistema dinámico de adquisición, enel  que la Diputación selecciona una bolsa de proveedores habilitados para un determinado tipo de suministro. Cuando un ayuntamiento adherido quiere adquirirlo o necesita que un servicio se preste en unas condiciones determinadas, directamente podrá pedir presupuestos a los proveedores incluidos en el sistema, cuya solvencia y capacidad ya ha sido analizada por la Diputación. Esta forma de contratación tiene una tramitación más sencilla que el contrato menor, supone un ahorro importante de tiempo y efectivos, al evitarse el procedimiento de licitación, pero sin que tengan que renunciar a que los suministros o servicios se presten de acuerdo a sus necesidades específicas, de lo que resulta una importante simplificación del procedimiento, ahorro de tiempo, agilidad, eficiencia y seguridad jurídica para los ayuntamientos adheridos.

Con este nuevo servicio, Vega subrayó que la Diputación se muestra “útil”, “moderna”, “innovadora” y a disposición de los consistorios. “Somos de las pocas diputaciones a nivel nacional que tiene una Central de Contratación, algo que sí se puede encontrar en el Estado y en la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias). 

Para el correcto funcionamiento de este nuevo servicio, la Diputación ha impartido cursos de formación a secretarios, interventores y alcaldes. “Y estamos a disposición de ellos para cualquier demanda de información”, añadió Vega. 

“La Ley de contratos del sector público supuso un antes y un después”, recuerda Vega, quien añade que la Diputación provincial, como administración “más cercana” a los ayuntamientos, tenía que ofrecer este servicio. No tiene ningún coste para los consistorios que se sumen a los diferentes contratos, aunque para la institución provincial le supone un esfuerzo en recursos humanos.

Para terminar, Vega animó a los empresarios y autónomos de la provincia a pujar por los contratos ofertados.