Los diputados regionales del PSOE y el PP defendieron de la mano el Estatuto
01/10/2010 - 09:45

Por: Francisco Campos
Los dos grupos políticos con presencia en las Cortes regionales manifestaron al unísono sus posturas en torno a la necesidad de un nuevo estatuto, ya que con el actual, afirman, no se puede dar satisfacción a los nuevos retos y realidades del siglo XX. La defensa en torno al derecho al uso preferente del agua de los pueblos de Castilla-La Mancha centró los discursos de los portavoces del PSOE y PP, José Molina y Leandro Esteban, respectivamente. Un documento que aspira a las máximas cotas de autogobierno que permite la Constitución.
Los portavoces de los Grupos socialista y popular en las Cortes de Castilla-La Mancha designados para defender el nuevo estatuto de autonomía en el Congreso de los Diputados para su toma en consideración no dudaron en mantenerse unidos como una piña frente a aquellas posturas que llegaron tras su intervención, como la de la portavoz de UPyD, Rosa Díez, abiertamente en contra de poner fecha a la caducidad del trasvase en 2015 en un documento estatutario, o las de los representantes de CIU y PNV, más interesados en establecer agravios comparativos sobre las cotas de autogobierno que pretende el texto que en realizar aportaciones útiles y encaminadas al consenso.
El portavoz socialista, José Molina, recordó que el primer texto nació en 1982; ha sido modificado en tres ocasiones y ahora no puede dar satisfacción a los nuevos retos y realidades del siglo XX. Derecho a disfrutar del agua e implantación de servicios adecuados de abastecimiento y saneamiento; uso preferente del agua y participación proporcional de la región en los órganos de decisión al respecto, son algunos de los pilares básicos expuestos. Queremos obtener el máximo nivel de autogobierno que permite la Constitución, indicó, un aspecto éste que fue duramente criticado por los nacionalistas vascos y catalanes, alegando que ellos fueron censurados en el Congreso cuando reflejaron en sus respectivas propuestas de estatutos artículos similares. Es un documento que está a favor de Castilla-La Mancha y no en contra de nada y de nadie, advirtió. Un texto que recoge una caducidad del trasvase que no puede ser acusada de insolidaria, en un contexto en el que se han trasvasado 10.000 hectómetros cúbicos desde la cabecera del Tajo, desde que se inauguró la infraestructura, y cuando los embalses se encuentran al 12 por ciento de su capacidad.
Molina defendió su postura alegando el uso responsable del agua. Hizo un repaso por los distintos proyectos en marcha: Plan Especial del Alto Guadiana, con el que se ahorra más de 200 hectómetros al año; o las políticas de regadío, basadas en sistemas de riego eficientes. Regamos poco, mejor y estamos haciendo obras esenciales para ahorrar agua, dijo. Concluyó su alocución con un alegato en defensa de la cancelación del trasvase: Sólo la aplicación de legalidad exigirá el incremento del caudal del Tajo, que ahora mismo está por debajo de seis metros cúbicos por segundo, por debajo de lo establecido en la ley. Recordó que Levante tiene una alternativa de la que carece la región: la posibilidad de desalar el agua del mar. Hay que alzar la mirada para ver la nueva cultura del agua, precisó, realizando una invitación al diálogo desde la firmeza de la defensa de nuestros intereses desde la lealtad constitucional y el respeto a la constitución.
Para Leandro Esteban (PP) el haber llegado de la mano con el Estatuto hasta el Congreso nos llena de orgullo y satisfacción. Es un documento indica- que nace de las aportaciones de la sociedad de Castilla-La Mancha durante su fase de ponencia parlamentaria. Tiene un objetivo fundamental, recordó: Abarcar el mayor grado de autonomía, dentro de los límites constitucionales. Una propuesta que sigue los valores de la transición democrática y los de una España mas próspera. El Estatuto, a su juicio, proporciona a los ciudadanos mayores y mejores oportunidades, con la asunción de nuevas competencias, otro motivo de reforma. El bienestar ciudadano ha sido la verdadera razón de la modificación. Un documento que recoge nuevos derechos, por lo que nos pareció justo dotarlos de garantía presupuestaria suficiente; que vela por una sociedad más equilibrada en la oferta de oportunidades y que prepara a la región para afrontar los retos de próximos años. Pero para ello es necesario un nuevo marco jurídico que lo facilite. En referencia al trasvase indicó que debemos remover algunos obstáculos que lastran nuestras posibilidades de proyección de futuro. Sin embargo prosiguió- propugnamos igualdad real de todas las regiones de España. En la línea planteada desde el PSOE recalca que el texto no plantea un estatuto contra nada ni nadie, está basado en la Constitución y en la idea de España que recoge.
El portavoz socialista, José Molina, recordó que el primer texto nació en 1982; ha sido modificado en tres ocasiones y ahora no puede dar satisfacción a los nuevos retos y realidades del siglo XX. Derecho a disfrutar del agua e implantación de servicios adecuados de abastecimiento y saneamiento; uso preferente del agua y participación proporcional de la región en los órganos de decisión al respecto, son algunos de los pilares básicos expuestos. Queremos obtener el máximo nivel de autogobierno que permite la Constitución, indicó, un aspecto éste que fue duramente criticado por los nacionalistas vascos y catalanes, alegando que ellos fueron censurados en el Congreso cuando reflejaron en sus respectivas propuestas de estatutos artículos similares. Es un documento que está a favor de Castilla-La Mancha y no en contra de nada y de nadie, advirtió. Un texto que recoge una caducidad del trasvase que no puede ser acusada de insolidaria, en un contexto en el que se han trasvasado 10.000 hectómetros cúbicos desde la cabecera del Tajo, desde que se inauguró la infraestructura, y cuando los embalses se encuentran al 12 por ciento de su capacidad.
Molina defendió su postura alegando el uso responsable del agua. Hizo un repaso por los distintos proyectos en marcha: Plan Especial del Alto Guadiana, con el que se ahorra más de 200 hectómetros al año; o las políticas de regadío, basadas en sistemas de riego eficientes. Regamos poco, mejor y estamos haciendo obras esenciales para ahorrar agua, dijo. Concluyó su alocución con un alegato en defensa de la cancelación del trasvase: Sólo la aplicación de legalidad exigirá el incremento del caudal del Tajo, que ahora mismo está por debajo de seis metros cúbicos por segundo, por debajo de lo establecido en la ley. Recordó que Levante tiene una alternativa de la que carece la región: la posibilidad de desalar el agua del mar. Hay que alzar la mirada para ver la nueva cultura del agua, precisó, realizando una invitación al diálogo desde la firmeza de la defensa de nuestros intereses desde la lealtad constitucional y el respeto a la constitución.
Para Leandro Esteban (PP) el haber llegado de la mano con el Estatuto hasta el Congreso nos llena de orgullo y satisfacción. Es un documento indica- que nace de las aportaciones de la sociedad de Castilla-La Mancha durante su fase de ponencia parlamentaria. Tiene un objetivo fundamental, recordó: Abarcar el mayor grado de autonomía, dentro de los límites constitucionales. Una propuesta que sigue los valores de la transición democrática y los de una España mas próspera. El Estatuto, a su juicio, proporciona a los ciudadanos mayores y mejores oportunidades, con la asunción de nuevas competencias, otro motivo de reforma. El bienestar ciudadano ha sido la verdadera razón de la modificación. Un documento que recoge nuevos derechos, por lo que nos pareció justo dotarlos de garantía presupuestaria suficiente; que vela por una sociedad más equilibrada en la oferta de oportunidades y que prepara a la región para afrontar los retos de próximos años. Pero para ello es necesario un nuevo marco jurídico que lo facilite. En referencia al trasvase indicó que debemos remover algunos obstáculos que lastran nuestras posibilidades de proyección de futuro. Sin embargo prosiguió- propugnamos igualdad real de todas las regiones de España. En la línea planteada desde el PSOE recalca que el texto no plantea un estatuto contra nada ni nadie, está basado en la Constitución y en la idea de España que recoge.