Los empleados de Cajasol aportan más de 2.000 euros al Banco de Alimentos de Guadalajara

Los empleados de Cajasol, entidad en la que está integrada Caja de Guadalajara, donan mensualmente y durante 12 meses, 2 euros o más de sus nóminas. Los fondos recaudados van destinados a los Bancos de Alimentos de las provincias donde Cajasol desarrolla su actividad. “Dónde vamos con dos euros” es el nombre de la campaña solidaria y de carácter social que, en respuesta a los momentos difíciles que atraviesan numerosas familias, ha lanzado el Programa de Voluntariado de Cajasol. Se trata de una iniciativa interna, con la participación de los departamentos de Recursos Humanos, Comunicación e Imagen y la Obra Social, que nació en 2009 a propuesta de los voluntarios y voluntarias del Programa de Voluntariado Corporativo y que se dirige a toda la plantilla de Cajasol. El director territorial de Cajasol de Castilla-La Mancha y Centro, José Aguilar, ha sido el encargado de hacer entrega del cheque por importe de 2.356 euros, a la presidenta del Banco de Alimentos de Guadalajara, Carmen Hombrados. Durante el encuentro, celebrado en Torre Caja de Guadalajara, Aguilar le explicó el funcionamiento y desarrollo de este programa, innovador y solidario, de la plantilla de Cajasol y conocía, de manera detallada, de Hombrados, la situación de diferentes ONG de Guadalajara a las que abastece el Banco de Alimentos para atender las necesidades de un número de familias, cada vez mayor, que recurren a este auxilio.El Banco de Alimentos de Madrid ha recibido también idéntica cantidad procedente de las donaciones de los empleados de Cajasol. El origen de esta acción manifiesta el importante rol que para la Obra Social cumplen los voluntarios y voluntarias: entran en contacto directo con las asociaciones y organizaciones sociales en las que colaboran, detectan y trasladan las necesidades emergentes y más prioritarias del momento en el Tercer Sector. Muchos de ellos, que prestan sus servicios en entidades como Banco de Alimentos, Cáritas o Cruz Roja, transmitieron a la Obra Social la difícil situación que atraviesan los beneficiarios de estas organizaciones. Unas organizaciones que actualmente se encuentran desbordadas por las peticiones de ayudas básicas, alimentos sobre todo, que solicitan los ciudadanos más castigados por la crisis económica. Aunque tanto la Obra Social de Cajasol como la propia Caja desde hace años vienen colaborando con estas entidades y con los ayuntamientos, intensificado su relación en los últimos meses, ésta resulta aún insuficiente. La demanda de alimentos es tan grande que no llegan a los almacenes, directamente se entregan a los centros que los solicitan para suministrar a los ciudadanos que lo necesitan. Ante esta problemática, el voluntariado de Cajasol hizo una llamada a la solidaridad de sus compañeros y compañeras, proponiéndoles que donen mensualmente, durante un año, 2 euros de sus nóminas. El mensaje con el que se dirigen a ellos es directo: “Con 2 euros al mes durante un año puede comer una familia un plato de legumbres, de pasta o de arroz a la semana; alimentos básicos para la dieta humana”. Con él se quiere manifestar que con un poco de todos conseguimos mucho. En un periodo en el que las organizaciones sociales se hacen más vulnerables y sus recursos se ven mermados, esta iniciativa emanada de los voluntarios y voluntarias de Cajasol, se presenta como una alternativa complementaria a las vías tradicionales de financiación. Con ella, se posibilita que éstas puedan continuar la importante labor que desarrollan.