Los locales situados en sótanos podrán acoger actividad comercial

El urbanismo centró los puntos más densos del pleno de ayer. Si bien una de las modificaciones aprobadas afecta a la compra de plazas de aparcamientos de titularidad pública, otra de ellas supone que los locales situados en sótanos y que hasta la fecha sólo podían ser utilizados como almacenes, a partir de ahora también podrán utilizarse con fines lucrativos y comerciales. Por otro lado, pero sin salir del área urbanística, el pleno aprobó dentro de este mismo punto que los trasteros queden devinculados a la construcción de viviendas y que éstos ya no tendrán una dimensión máxima de un 15 por ciento de la superficie de ésta, sino que podrán tener, como regla general, hasta 13,5 metros cuadrados.
    Ambas medidas fueron aprobadas en una única votación con los votos favorables del PP y con las abstenciones de los Grupos municipales del PSOE e IU. Ambas formaciones consideraron “buena” la modificación, sin embargo solicitaron delimitar la construcción de trasteros a como máximo dos por vivienda, porque, como explicó el concejal del PSOE, Daniel Jiménez, en lugar de promociones de viviendas, “esto puede convertirse en promociones de trasteros”. Por su parte, el portavoz de IU, José Luis Maximiliano, consideró que la medida sólo “va a enriquecer a los promotores, que se van a lucrar con la venta de trasteros”.
    En este punto, el concejal de Urbanismo, Juan Antonio De las Heras, pidió a Maximiliano que no mire más allá de la medida, asegurando que la modificación “no está ligada a nada ni a nadie”, y poniendo por encima de todo “la transparencia” que el departamento de Urbanismo profesa en Guadalajara. El único objeto de la reforma del POM en este caso, dijo el concejal, es “promover la actividad económica” y “generar puestos de trabajo”.

Protesta funcionarial
El pleno de ayer tuvo una nota reivindicativa, pues un nutrido grupo de funcionarios del Ayuntamiento protagonizó una protesta pacífica. Desde la Junta de Personal negaron que se tratara de una protesta por la reducción de sueldo contemplada en el llamado Decreto ZP, como manifestaron desde el equipo de Gobierno, sino que fue una protesta directa contra la concejala de Personal, Encarnación Jiménez, “por tratar de recortar por encima del 5 por ciento las retribuciones de todos los empleados del Ayuntamiento”.
    Por su parte, desde el equipo de Gobierno aseguraron que todos los recortes llevados a cabo en los sueldos de los funcionarios se remiten al Real Decreto por el que se adoptan medidas extraordinarias para la reducción del déficit público, por lo que, a quien deben dirigir sus protestas es hacia el Gobierno.