Los parados que reciben formación crecen un 160 por ciento desde que estalló la crisis
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
La crisis económica que está azotando al país, al igual que al resto del mundo, está provocando un gran aumento en el número de personas que pierden su empleo. No obstante, estos parados están aprovechando para mejorar su formación en sus diferentes ocupaciones, creciendo en un 160 por ciento las personas desempleadas que reciben algún tipo de curso de mejora de conocimientos. En total son 788.200 parados los que siguen algún tipo de curso, un 17,1 por ciento del total de las personas sin trabajo.
Los parados que reciben algún tipo de formación se han incrementado en un 160 por ciento desde que estalló la crisis, en el tercer trimestre de 2007, lo que supone que, desde entonces, 485.000 desempleados más han decidido hacer cursos formativos. Así lo indica un informe de la patronal de grandes empresas de trabajo temporal (Agett), que señala que al finalizar marzo, 788.200 parados se estaban formando. Esto supone que de los 4,6 millones de desempleados que hay España, sólo el 17,1% ha optado por mejorar la formación, porcentaje, no obstante, que supera en casi cuatro puntos al del tercer trimestre de 2009.
Dentro de los que sí reciben formación, casi dos tercios de los desempleados ha optado por la formación no reglada, y un tercio, por la reglada, es decir, por la homologada por el Ministerio de Educación. Agett estima que la tendencia bajista de los últimos años se ha revertido, de tal forma que la proporción de parados que reciben formación se verá incrementada en los próximos trimestres.
Pese a que el porcentaje de parados que se forma va en aumento, aún se está lejos del nivel anterior a la crisis. Antes de que ésta estallara, cerca del 22 por ciento de los parados recibían algún tipo de formación para incrementar sus oportunidades de inserción laboral. Según Agett, para llega ahora a ese porcentaje sería necesario que un millón de parados estuvieran formándose.
Mejor formados
Para el presidente de Agett, Francisco Aranda, lo óptimo sería que el cien por cien de los parados recibiese algún tipo de formación, especialmente aquellos que llevan más de un año en el desempleo. Esta formación no debería ser genérica, sino enfocada a un puesto de trabajo concreto y que le proporcionase al desempleado las herramientas necesarias para poder incorporarse de manera inmediata a un puesto de trabajo, indicó Francisco Aranda.
Según Agett, los trabajadores con mayores niveles de formación son los que menos están sufriendo las consecuencias de la crisis económica que está qazontando a todo el mundo. De hecho, los trabajadores con menor tasa de paro (2,1 por ciento) son los que poseen un título de doctorado, seguidos de aquellos con educación superior (11,4 por ciento). Por el contrario, los trabajadores sin estudios son los que se encuentran en una peor situación, con una tasa de paro del 47,31 por ciento.
Los jóvenes son los que más optan por formarse, mientras que los que menos se forman son aquellos que tienen entre 35 y 44 años. Sólo 13 de cada 100 parados que cursa formación es mayor de 45 años.
Dentro de los que sí reciben formación, casi dos tercios de los desempleados ha optado por la formación no reglada, y un tercio, por la reglada, es decir, por la homologada por el Ministerio de Educación. Agett estima que la tendencia bajista de los últimos años se ha revertido, de tal forma que la proporción de parados que reciben formación se verá incrementada en los próximos trimestres.
Pese a que el porcentaje de parados que se forma va en aumento, aún se está lejos del nivel anterior a la crisis. Antes de que ésta estallara, cerca del 22 por ciento de los parados recibían algún tipo de formación para incrementar sus oportunidades de inserción laboral. Según Agett, para llega ahora a ese porcentaje sería necesario que un millón de parados estuvieran formándose.
Mejor formados
Para el presidente de Agett, Francisco Aranda, lo óptimo sería que el cien por cien de los parados recibiese algún tipo de formación, especialmente aquellos que llevan más de un año en el desempleo. Esta formación no debería ser genérica, sino enfocada a un puesto de trabajo concreto y que le proporcionase al desempleado las herramientas necesarias para poder incorporarse de manera inmediata a un puesto de trabajo, indicó Francisco Aranda.
Según Agett, los trabajadores con mayores niveles de formación son los que menos están sufriendo las consecuencias de la crisis económica que está qazontando a todo el mundo. De hecho, los trabajadores con menor tasa de paro (2,1 por ciento) son los que poseen un título de doctorado, seguidos de aquellos con educación superior (11,4 por ciento). Por el contrario, los trabajadores sin estudios son los que se encuentran en una peor situación, con una tasa de paro del 47,31 por ciento.
Los jóvenes son los que más optan por formarse, mientras que los que menos se forman son aquellos que tienen entre 35 y 44 años. Sólo 13 de cada 100 parados que cursa formación es mayor de 45 años.