Los Reyes visitan Guadalajara con sorpresa final para los niños

Melchor, Gaspar y Baltasar, junto a sus séquitos, fueron, un año más, fieles a su cita con los guadalajareños. Como cada 5 de enero Sus Majestades de Oriente llegaron hasta la capital, esta vez en carroza, acompañados por sorpresas y repartiendo ilusiones, especialmente entre los más pequeños de la casa.

El desfile empezó su lento ascenso desde la calle Madrid con puntualidad, si bien pronto se topó con problemas de acceso a la hora de atravesar la calle Miguel Fluiters, lo que retrasó su llegada a las partes superiores del recorrido ante la expectación del público guadalajareño, realmente multitudinario a pesar de las bajas temperaturas. 

La primera carroza en aparecer fue la de la Estrella de la Navidad y la Anunciación, a la que seguían de cerca San José y la Virgen María a lomos de un burro, recreando distintas escenas del catolicismo. De hecho, las legiones romanas y la carroza de Herodes también estuvieron presentes en el desfile. Entre unas y otras carrozas ocho grupos de dulzaineros y una batukada pusieron la nota musical a la cabalgata. Enseguida asomaron las carrozas más esperadas, las de los Magos de Oriente, con Melchor a la cabeza, seguido por Gaspar y Baltasar, repartiendo caramelos y verificando que los niños se habían portado bien antes de su reparto de regalos nocturno.

Junto a ellos, los que más llamaron la atención, como cada año, fueron el rebaño de ocas, perfectamente coordinadas y muy obedientes. También dejaron boquiabiertos a niños y mayores los burros, los bueyes y los caballos de la legión romana, realmente hermosos. 

Cerrando el desfile la sorpresa la dieron las carrozas de la patrulla canina (Paw Patrol), y de las películas Inside Out y de los Minions, con sus tres protagonistas, Kevin, Stuart y Bob. 

Un cortejo de casi 300 personas acompañó a los Reyes, entre romanos, pastores, músicos, artistas de ambientación, etc. El recorrido comenzó a las as 18.00 horas en la calle del Río para seguir por la calle Madrid, Plaza de los Caídos, Miguel Fluiters, calle Mayor, Fernández Iparraguirre hasta el cruce con la calle Sigüenza, volviendo por Fernández Iparraguirre hasta la explanada de San Ginés. Allí los Reyes Magos adorarán al Niño Jesús en el Belén Viviente.