Los segovianos afincados en Guadalajara celebraron su tradicional jornada de confraternización

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

El Centro Segoviano ‘Marqués de Lozoya’ de Guadalajara celebró ayer sábado su tradicional Jornada de Exaltación Segoviana, que en su edición número 53, logró congregar en la capital a algo más de un centenar de personas. Tras la misa y una pequeña muestra musical del folklore castellano, en la que no faltaron las jotas, se celebró la comida de la hermandad, momento en el que se rindió homenaje a aquellas instituciones y personalidades que han destacado este año por su defensa de la cutura castellana y a las que se entregó una insignia.
Los segovianos residentes en Guadalajara sacaron del armario sus mejores galas para asistir a la LIII Jornada de Exaltación Segoviana, el encuentro anual de confraternización que logró reunir en la capital a más de un centenar de personas.
Los actos de la jornada se iniciaron con una eucaristía a las 12.00 horas en la iglesia del Carmen, en la que también estuvieron presenten los Dulzaineros del Centro Segoviano, los mismos que se encargaron de animar la salida de los asistentes del templo con canciones tradicionales castellanas como jotas, corridas y charradas.
El Casino Club de Campo fue el lugar escogido para celebrar la comida de la hermandad, enclave en el se procedió a imponer las distinciones otorgadas por el Centro a personalidades e instituciones por su labor en defensa de la cultura castellana. Homenajes, en definitiva, que este año recayeron en el Ayuntamiento de La Granja de San Ildefonso; la presidenta de la Diputación provincial de Guadalajara, María Antonia Pérez León; el alcalde de Guadalajara, Antonio Román, quien tuvo que abandonar el evento anticipadamente debido a su compromiso con la carrera del Tenorio Mendocino; el alcalde de La Granja de San Ildefonso, José Luis Vázquez; José Luis Benito, antiguo miembro de la junta directiva del Centro; y Julio Molina por su desinteresada colaboración con la institución. Todos ellos recibieron la insignia de plata, mientras que la de oro fue concedida en esta ocasión a Lucía Martín en reconocimiento a su labor como vicepresidenta del Centro. Asimismo, todos ellos recibieron miel de la Alcarria y un libro con las excelencias de la provincia de Segovia.
Tras las palabras de los homenajeados, hubo un sorteo de regalos y nuevamente la actuación de los Dulzaineros del Centro Segoviano, que pusieron con música el broche final a una gran jornada entre amigos.