Los sindicatos piden cláusulas de revisión salarial en los convenios
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
UGT asegura que la inflación que sufre actualmente España no tiene su origen en los costes salariales, sino en el choque energético y en los precios de los alimentos y materias primas en los mercados internacionales.
Por ello consideró que las llamadas a la moderación salarial que han realizado el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de España no tienen sentido.
La organización dirigida por Cándido Méndez también manifestó su desacuerdo con la política monetaria restrictiva del BCE, pues, según advirtió, puede agravar los procesos de desaceleración económica, provocando una pérdida de competitividad hacia el exterior e incrementando el endeudamiento de los hogares españoles.
UGT, que apostó por abrir un debate sobre el modelo energético para reducir la dependencia española, reclamó además a las empresas menos expuestas a la competencia que diseñen responsablemente sus políticas de precios, y dejen de aumentar éstos y los beneficios sin ofrecer mayor calidad e innovación de los productos.
En este contexto pide al Gobierno políticas específicas dirigidas a eliminar las restricciones a la competencia que persisten en determinados mercados, así como actuaciones para aumentar y mejorar la transparencia en el mecanismo de formación de precios. Asimismo, demandó al Ejecutivo que controlar los aumentos de precios en sectores donde las tarifas son establecidas directamente por los poderes públicos o donde poseen una capacidad de influencia muy elevada.
De la misma opinión es CC OO quien reclama una intervención urgente y decidida del Gobierno para que no se le vaya de las manos el control de la inflación, centrándose en la evolución de los excedentes empresariales, sobre todo de los sectores menos expuestos a la competencia internacional y de los que actúan en régimen de cuasi monopolio.
El sindicato liderado por José María Fidalgo advirtió además de que las necesarias ganancias de productividad de las empresas no pueden proceder de rebajar los salarios. En este sentido, afirmó que las cláusulas de garantía salarial deben de seguir siendo el elemento de referencia central de la política salarial, sin las cuales, avisó, no es posible un acuerdo en materia de salarios.
La organización dirigida por Cándido Méndez también manifestó su desacuerdo con la política monetaria restrictiva del BCE, pues, según advirtió, puede agravar los procesos de desaceleración económica, provocando una pérdida de competitividad hacia el exterior e incrementando el endeudamiento de los hogares españoles.
UGT, que apostó por abrir un debate sobre el modelo energético para reducir la dependencia española, reclamó además a las empresas menos expuestas a la competencia que diseñen responsablemente sus políticas de precios, y dejen de aumentar éstos y los beneficios sin ofrecer mayor calidad e innovación de los productos.
En este contexto pide al Gobierno políticas específicas dirigidas a eliminar las restricciones a la competencia que persisten en determinados mercados, así como actuaciones para aumentar y mejorar la transparencia en el mecanismo de formación de precios. Asimismo, demandó al Ejecutivo que controlar los aumentos de precios en sectores donde las tarifas son establecidas directamente por los poderes públicos o donde poseen una capacidad de influencia muy elevada.
De la misma opinión es CC OO quien reclama una intervención urgente y decidida del Gobierno para que no se le vaya de las manos el control de la inflación, centrándose en la evolución de los excedentes empresariales, sobre todo de los sectores menos expuestos a la competencia internacional y de los que actúan en régimen de cuasi monopolio.
El sindicato liderado por José María Fidalgo advirtió además de que las necesarias ganancias de productividad de las empresas no pueden proceder de rebajar los salarios. En este sentido, afirmó que las cláusulas de garantía salarial deben de seguir siendo el elemento de referencia central de la política salarial, sin las cuales, avisó, no es posible un acuerdo en materia de salarios.