Los socialistas acusan a Román de engañar y de talar las acacias de la antigua cárcel de mujeres
Esta mañana, varios vecinos de la calle Ángel Martín Puebla y adyacentes han impedido que operarios de una empresa contratada por el Ayuntamiento de Guadalajara procediese a la tala del conjunto de acacias que flanquean la fachada principal de la antigua Cárcel de Mujeres. Tras tener conocimiento de los hechos, miembros del Grupo Municipal Socialista se han personado en el lugar y han comprobado que uno de los ejemplares ya había sido cortado por el pie y se estaba desmochando la copa y las ramas principales de otro.
Esta decisión incumple el compromiso adquirido el pasado mes de junio por el equipo de Gobierno del Partido Popular. Con motivo de las obras de acondicionamiento y urbanización que se llevan a cabo en esta zona, los vecinos recogieron cerca de medio centenar de firmas para reclamar la preservación de las seis acacias que se levantan en este entorno y que tienen una antigüedad superior a los 60 años, según testimonios de los propios residentes. En la reunión que mantuvieron in situ con Jaime Carnicero y Lorenzo Robisco, concejales de Infraestructuras y Medio Ambiente, respectivamente, se acordó salvaguardar los árboles y, de este modo, evitar su tala, tal y como se preveía en el proyecto original aprobado por el equipo de gobierno del PP.
Tras aquel compromiso mutuo, se entablillaron los troncos para protegerlos de los golpes de la maquinaria y garantizar su integridad. La empresa adjudicataria de las obras que se llevan a cabo en esta zona urbanizó las aceras en este punto, respetando las acacias y los alcorques que ya estaban definidos. Cuál ha sido nuestra sorpresa al enterarnos por medio de los vecinos que esta mañana se iban a reanudar los trabajos de tala que se iniciaron el fin de semana y que acabó con uno de los ejemplares. El equipo de Gobierno del Partido Popular ha incumplido la palabra que dio a los vecinos de mantener en pie estos árboles y ha decidido por su cuenta y riesgo acabar con ellos. Antonio Román nos ha acostumbrado a que estas medidas polémicas se adopten con premeditación y alevosía, aprovechando el periodo vacacional y la ausencia de los vecinos. Como buen vasallo que es, Jaime Carnicero cumple las órdenes dadas y asume las decisiones ajenas. Esta vez, les ha salido el tiro por la culata y los vecinos han estado prestos para poner las cosas en su sitio, defiende Julia de Miguel, concejala del PSOE del Ayuntamiento de Guadalajara.
El Grupo Socialista, que exige al Ayuntamiento de la capital la paralización inmediata de la tala, acusa a Antonio Román de hacer dejación de funciones a conveniencia y de consentir que en su ausencia se adopten decisiones que no cuentan con el respaldo de los vecinos. De Miguel recuerda que existe un informe del técnico municipal de Medio Ambiente que recomienda que se preserven y mantengan intactos los seis ejemplares de acacias dado que no suponen riesgo para las conducciones y canalizaciones de servicios que discurren por el subsuelo, ya que se encuentran situadas a varios metros de la línea de acacias. En caso contrario, el Ayuntamiento debería emitir un nuevo informe a través del departamento de Urbanismo e Infraestructuras que aconsejase la tala inmediata de los árboles, cuestión que hasta la fecha no se ha producido.
El PSOE recuerda que no es la primera vez que Antonio Román adopta este tipo de decisiones y permite que sean otros los que asuman ese papel. Jaime Carnicero ha aceptado de buen gusto esa función de leñador. Es descabellado y un auténtico despropósito que el alcalde se haya gastado cerca de 100.000 euros en instalar difusores en la calle Mayor y, sin embargo, esté acabando con las especies naturales de la ciudad, que son las realmente eficaces en la lucha contra la contaminación ambiental. Ésta es la peculiar manera que Antonio Román tiene de preservar el medio ambiente, lamenta Julia de Miguel.