Los socialistas dicen que ni aficionados ni empresas quieren la feria taurina de Román

Empezó echando a los aficionados, quienes se manifestaron tajantemente en contra del modelo planteado por el PP para los festejos taurinos de la ciudad y, ahora, ha echado a las empresas. Ningún empresario se ha interesado por organizar la feria taurina de Guadalajara lo que, a juicio de José María Alonso, concejal socialista, “nos viene a dar claramente la razón de que se trataba de una feria mala, poco ambiciosa, con muy pocos festejos, nada atractiva para el público y planteada para muy poco tiempo”. El Grupo Municipal Socialista ya alertó de que el pliego de condiciones que había elaborado el equipo de gobierno venía a hundir definitivamente la feria taurina tras tres años de una pésima gestión por parte del actual concejal, Lorenzo Robisco, “quien pasará a la historia como el concejal que se cargó los encierros con toros en puntas, organizó suelta de reses para sustituirlos, y confeccionó una feria taurina en nuestra ciudad sólo y exclusivamente buscando un refrendo populista”.

   José María Alonso señala que Robisco ha decepcionado a los aficionados, poniendo los intereses de las empresas por encima de los de la ciudad y planteando una feria pensando más en sí mismo y en la empresa candidata que en el deseo de los aficionados y del público en general. Ésa, en su opinión, es una estrategia equivocada que “al final, ha concluido con que ninguna empresa muestre interés por el pliego redactado ni por el modelo de feria que se propone”. El concejal socialista ha insistido en que, para recuperar la calidad de nuestra feria, se necesita trabajo continuado, originalidad y conocimiento. No ha habido acierto y se necesita una fórmula diferente, “con un solo pliego de condiciones para la gestión de la plaza y la organización de los encierros y demás festejos populares”.

   De esta manera se podría dar gusto al aficionado más purista y al que disfrute de los festejos populares, pues se facilitaría la posibilidad de que se lidiaran en la plaza los toros que se corriesen por la mañana y la feria de Guadalajara recuperaría la calidad y la fama que obtuvo durante el gobierno del PSOE y que hizo que muchas personas visitaran nuestra ciudad. El PSOE aboga por una fiesta más larga, con mayor número de festejos ordinarios, con calidad auténtica en los encierros, y con la presencia, al menos de un festejo de promoción que, según Alonso, “además de ser barato es valorado por los aficionados”. Pide también que el contrato se proponga por más años, y no por uno sólo, a fin de que las empresas realicen apuestas firmes y no se propicie que “realicen su trámite, en función exclusiva de sus intereses, y se vayan de la feria sin ningún otro compromiso con la ciudad”.