Los talibán ejecutan en público a una mujer por adulterio

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
AFGANISTÁN
Un portavoz niega la implicación del grupo en la ejecución
Los talibán han ejecutado en público a una mujer afgana acusada de cometer adulterio, según dijo ayer un portavoz de la Policía, un hecho que recuerda a la época del gobierno talibán de años anteriores en Afganistán.
Abdul Jabar, un alto cargo de la Policía de la provincia de Badghis, noroeste de Afganistán, dijo que los talibán ejecutaron a tiros a una mujer viuda de 48 años acusada de adulterio en el distrito de Qades de dicha provincia, tras propinarle decenas de latigazos.
“Sucedió delante del público (...). A pesar de que nadie lo ha denunciado, el Gobierno tomará sus propias medidas ante el incidente”, indicó Jabar en declaraciones a Reuters por teléfono desde Badghis. El hombre con quien presuntamente la mujer mantuvo relaciones, que no ha sido identificado, ha huido, añadió Jabar.

Rechazo oficial
Por su parte, el principal portavoz talibán, Qari Mohamed Yusuf, se refirió a la ejecución pública como “un trabajo mal hecho”. “Nosotros lo rechazamos. Quien lo haya hecho no es miembro de los talibán y está intentando difamarnos”, declaró Yusuf por teléfono sin revelar el lugar en el que se encontraba en ese momento.
Otro portavoz talibán dijo anteriormente que no estaba al corriente del incidente. La insurgencia talibán, el Gobierno y las tropas extranjeras en Afganistán se encuentran inmersos en una guerra de propaganda para ganarse la confianza de los civiles afganos y ambas partes se acusan habitualmente de cometer atrocidades.
De confirmarse la información, ésta sería la segunda mujer ejecutada por los talibán desde que fueron derrocados hace nueve años, después de que otra mujer fuera ejecutada por supuestamente espiar para las tropas extranjeras deslegadas en el país.
La revista Time publicó en la portada de su número del 9 agosto la fotografía de una joven afgana a la que habían cortado la nariz como castigo por haber huido de los abusos que sufría en casa de su marido, una historia que los talibán niegan.
Durante su etapa en el poder entre 1996 y 2001, los talibán castigaron públicamente con lapidaciones y flagelaciones a los acusados de mantener relaciones sexuales extramatrimoniales.