Maligno: Terror ochentero fresco y divertido

¿Se nos ha pasado ya la nostalgia por los 80? No está claro. Stranger Things trajo de la mano un resurgir de aquel cine de antes, con el que tantos y tantos aprendimos a amar el séptimo arte de una forma más lúdica que académica. Sin embargo, ¿qué era el cine de los 80? Con todo este movimiento retro parece que para recuperar ese cine es fundamental recuperar también el contexto. Y no es así.

Con Maligno, James Wan recupera sobre todo las formas del cine ochentero, pero ambientándolo en la actualidad. No hace falta apelar a la nostalgia para recuperar las claves de otra época. Wan nos devuelve personajes icónicos, clichés en gran medida, para regalarnos una historia como las de antes, sin grandes sustos ni tramas existencialistas, sin necesidad de querer iluminarnos sobre algún aspectos de la vida, solo ofreciendo entretenimiento.

Madison es una mujer que vive con un marido maltratador y que ha sufrido varios abortos. Una noche, tras sufrir un nuevo ataque, algo entra en su casa y acaba con su esposo haciendo, además, que ella pierda su hijo. A partir de ahí, comenzará a ver visiones de asesinatos espeluznantes que, para más inri, resultan ser reales y estar relacionados con su pasado, lo que la convertirá automáticamente en sospechosa de los crímenes.

Si la última película de Wan tiene una ventaja es su superficialidad, pero su superficialidad bien. El director propone una historia capaz de enganchar al espectador que quiera algo tan divertido como un título con indudable sabor de Serie B perfectamente manufacturado usando referentes como La mitad oscura, Basket Case o incluso Terminator, que se toma en serio la labor de entretener sin tomar por estúpido a nadie.

Maligno (2021, USA)

Director: James Wan

Reparto: Annabelle Wallis, George Young, Maddie Hasson.