María Lara presentará este domingo en Pareja su libro 'Brujas, magos e incrédulos en la España del Siglo de Oro’

01/05/2014 - 12:16 Redacción

Este domingo, María Lara, doctora en Historia y profesora de la Universidad a Distancia de Madrid (UNED), presentará en Pareja su libro “Brujas, magos e incrédulos en la España del Siglo de Oro”. La cita es en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, a partir de las 12.30 horas.

Además de presentar el libro, Lara hará una mención especial al legendario pasaje de las brujas de Pareja. Cuenta la leyenda, corroborada en parte por los archivos históricos de la villa, que en el primer tercio del siglo XVI, la extraña muerte de varios niños en la comarca de Pareja desató la ira de la población contra algunas mujeres por su comportamiento. La mayoría de las acusaciones recayeron en Juana las Morillas, que junto a a Francisca La Ansarona se autoinculpó en un proceso inquisitorial de encontrarse con diablos… Lara aportará el domingo algunos datos sobre aquel proceso inquisitorial y sobre el contexto histórico en el que se produjo. Sobre “Brujas, magos e incrédulos en la España del Siglo de Oro” Desde las entusiastas crónicas de Heródoto, recopilador antológico de las guerras médicas, y la analítica narración de sucesos de Tucídides, introductor de la dimensión crítica a propósito de la guerra del Peloponeso, la ciencia histórica ha conocido un complejo entramado de paradigmas historiográficos que, partiendo de la dimensión político-militar, ha ido trocando el largo enfoque del telescopio por el cercano del microscopio. Así, hoy el historiador acoge en su laboratorio no sólo a los grandes personajes sino también a las “clases subalternas”, configuradoras del cuerpo social.
En este orden de cosas, tal vez la Historia cultural- heredera del crisol de miradas generado por la Escuela de los Annales- sea una de las corrientes que, con mayor profundidad, nos permite tomar el pulso del tiempo, al permitirnos la combinación de las metodologías de la Antropología y de la Historia con la intención de ofrecer interpretaciones culturales de la experiencia histórica. De hecho, si hoy sacáramos de una de las pinturas del Siglo de Oro a uno de los caballeros o de las damas perpetuados en el lienzo- se me antoja a la muchacha apoyada sobre el alféizar de la ventana de Murillo- y le preguntáramos por cómo es su vida, quizás se aturullaría y deberíamos infundirle calma para que nos describiera con detenimiento su día a día desgajado por nosotros en artificiales parcelas que en la mente conocen una fusión inusitada.
Por eso, porque el límite entre nuestros pensamientos es sutil y porque la duda es la única prueba de nuestra existencia, propongo al lector adentrarse en el complejo mundo de las creencias de la mano de los heterodoxos y libertinos españoles, con su especificidad conquense, habida cuenta de la uniformidad de fe marcada por Trento en la monarquía hispánica, en tanto que adalid del orbe católico en la Edad Moderna.