Marzo con virus

14/03/2020 - 12:36 Pedro Villaverde Martínez

 El ecuador del curso  ha llegado con colegios e institutos cerrados.

 El ser humano  sigue dando vueltas a la rueda del tiempo y éste sí que no se detiene. Burla burlando que dijera el poeta…van pasando los días y esa rueda se encuentra ya en el tercer escalón de eso que llamamos calendario. Caminamos hacia la primavera cuyo nombre parece indicar alegría, pero lo hace sembrando el desconcierto, los miedos, la incertidumbre por ese virus cada día más cercano a nuestros hogares. Todavía falta tiempo para ese 21 de marzo pero  llegará  con la rapidez que el tiempo huye como dicen algunas leyendas de esos relojes que todos conocemos. No vamos a cansar inútilmente con la evidencia sino tan sólo desear que esta nueva primavera que ya se barrunta nos traiga la superación de este coronavirus que nos ha sorprendido en un invierno de altas temperaturas que iniciábamos preocupados por un nuevo gobierno que sembraba demasiadas dudas y que ha quedado marcado por una crisis sanitaria internacional que altera ya la vida de nuestra ciudad hasta el punto de suspenderse clases, actos y aplazarse nuestros queridos Populares de Nueva Alcarria, por primera vez en la historia. 

  El ecuador del curso  ha llegado con colegios e institutos cerrados. Los  estudiantes miran con alegría pero también con preocupación pensando en los frutos que el final de curso  traerá. Es pronto pensar en ese final cuando estamos en marzo, pero recordemos aquello de que el tiempo vuela y se debe estudiar con la debida antelación y sería no bueno perder estas semanas interrumpidas de curso.

  Llegó marzo con el Día de la Mujer, la Feria Apícola que organiza cada año nuestro amigo José Luis Herguedas y todo se paró por culpa de una enfermedad desconocida de incierto final en el tiempo y de consecuencias más imprevisibles aun. Deseamos que el saber de nuestros investigadores y el acierto de los expertos sanitarios en sus decisiones permitan superar pronto este mal que a los más mayores nos preocupa de manera especial por aquello de que donde fuerzas no alcanzan… Esperemos que el final de este mes nos traiga la alegría, además de la primavera y el cambio de hora, de la superación de esta patologia  que nos vuelve a evidenciar que la salud es lo más importante sin menospreciar los daños económicos.