Medio centenar de personas se sumaron a una protesta ‘carnavalesca’ en Santo Domingo

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: DIANA PIZARRO
Convocados por la plataforma ‘Más de un ciudadano’, cerca de medio centenar de personas se dieron cita en la plaza de Santo Domingo de la capital para participar en un acto reivindicativo en protesta por el cementerio nuclear. La cita dio comienzo con una sirenada que fue acompañada con canciones festivas cuyas letras se habían adaptado para la ocasión. Posteriormente, la plataforma, que se reinvindicó como un grupo de ciudadanos fuera de toda ideología, simbolizó un entierro con el ataúd de Guadalajara, que se dejó junto al Palacio del Infantado, “porque si nos instalan el ATC, tenemos que comenzar a buscar otra provincia”.
Chirigotas, canciones de la tuna, parodias de los alcaldes de Yebra y Ascó... La plaza de Santo Domingo de la capital fue ayer el escenario de un espectáculo festivo que se mezcló con el aire carnavalesco que vive la provincia este fin de semana. Disfraces, caras cubiertas por máscaras y hasta el entierro de la sardina... o mejor dicho, de la provincia. Convocados por la plataforma Más de un ciudadano, cerca de medio centenar de personas se concentraron para demostrar su oposición a la instalación en Yebra del Almacén Temporal Centralizado (ATC), en una de las muchas manifestaciones que se han convocado para las próximas semanas. “No estamos de Carnaval, sino protestando y reivindicando que Guadalajara ya ha cumplido con creces con la energía nuclear”, gritaba ayudado por un altavoz uno de los miembros de la plataforma, quien animó a todos los ciudadanos que paseaban por la zona a sumarse a la protesta. “Nosotros somos ciudadanos anónimos, sin ningún tipo de ideología, pero que estamos hartos de que nos tomen el pelo”. Asimismo, mientras otros miembros de Más de un ciudadano preparaban el equipo para realizar una sirenada de protesta, el portavoz recordaba la “gran” manifestación contra el ATC que se celebrará el próximo sábado en Guadalajara. Con la cuenta atrás, las personas concentradas se fueron preparando para el estruendo de la sirena, un sonido que terminó de confundir a más de uno, creyendo que se encontraba ante un acto de Carnaval. Tras este momento, al que se sumaron varias personas con silbatos y cencerros, comenzó el momento más festivo de la cita, en el que la plataforma Más de un ciudadano invitó a todos los presentes a interpretar una canción de la tuna, Triste y Sola, pero con una letra un tanto especial. Sin ningún complejo, los manifestantes se lanzaron a cantar que ‘Triste y sola se queda la Alcarria. Triste y llorosa, llora por tu provincia’, aunque eso sí, ayudados por un papel con las letras.
Tras esta original forma de protesta, se dio paso a una parodia protagonizada por los alcaldes de Yebra y Ascó, interpretados por dos ciudadanos que simulaban una conversación entre los dos regidores que han solicitado el ATC para sus pueblos. Los vecinos de Guadalajara también tuvieron la oportunidad de opinar sobre la instalación del silo nuclear, ya que se dio la posibilidad de hacer uso del micrófono. “Nos están engañando, pues nos dicen que el ATC de Holanda funciona muy bien, pero esto no es Holanda. Además, allí tardaron 20 años en decidir dónde se iba a ubicar la instalación, mientras que aquí se quiere hacer en seis meses y dejando vía libre a los ayuntamientos”, expresó un vecino cubierto por un mono y una máscara de gas, quien también señaló que “el 90 por ciento del dinero que le estamos pagando a Francia por guardar nuestros residuos es una fianza que nos será devuelta”.
Acompañados en todo momento por una charanga, los vecinos que protestaron contra el ATC participaron en cada una de las canciones a las que dio paso el portavoz de la plataforma, como El cementerio en Yebra no se va a construir o la chirigota que fueron creando los propios ciudadanos. ‘El alcalde de Yebra por un puñao de euros se vendió... y la Alcarria murió’.
Tras levantar el ánimo a más de uno, aunque entre tanta euforia el portavoz de la plataforma aseguró que “el cementerio nos lo traen sí o sí”, toda la comitiva, entre los que se encontraban algunos miembros de Izquierda Unida, partió con el ataúd de la provincia hacia el Palacio del Infantado, donde simbolizaron un encierro. “Si nos traen el cementerio nuclear, tenemos que enterrar a esta provincia y comenzar a buscarnos otra, porque Guadalajara ya no tiene futuro”.