Ozono: ese invisible enemigo del verano que mantiene en alerta a las administraciones
01/10/2010 - 09:45
Los colectivos que pueden resultar más perjudicados con el incremento de los niveles de ozono, como los niños, los mayores o los deportistas, deberán prestar mayor atención cuando se expongan al aire libre, ya que pueden llegar a sufrir complicaciones de tipo respiratorio o alérgico. Por encima de los 180 microgramos por metro cúbico de aire se establece el umbral de información a la población, y cuando se superen los 240 microgramos se podrá hablar de nivel de alerta. El concejal de Medio Ambiente, Lorenzo Robisco, recuerda las principales medidas para evitar riesgos innecesarios y que el Ayuntamiento informa al ciudadano cuando los niveles se disparan.
Con la llegada del verano y ante los golpes de calor que azotan con frecuencia el centro de la Península, los niveles de ozono troposférico se disparan, pudiendo causar diversos problemas de salud a los ciudadanos, principalmente de tipo respiratorio, dolores de cabeza, náuseas o complicaciones de tipo alérgeno.
Con el fin de que los principales grupos de riesgo como son niños, deportistas o personas mayores se encuentren lo más protegidos posible, el Ayuntamiento de Guadalajara ha puesto en marcha, un año más, el protocolo de información de episodios de contaminación atmosférica. Este sistema alertará cuando se sobrepase el nivel establecido por la ley en más de 180 microgramos por metro cúbico de aire explica el concejal de Medio Ambiente, Lorenzo Robisco, y alertará cuando la concentración supere los 240 microgramos, además de dar notificación inmediata a los medios de comunicación. El propio Consistorio pone a disposición de los ciudadanos la posibilidad de darse de alta en su portal web para así recibir las alertas vía sms en sus teléfonos móviles.
Los distintos niveles de ozono, que se establecen en función de su mayor o menor incidencia sobre la salud de las personas, abarcan desde los 40 microgramos por metro cúbico durante un año, que corresponde al umbral de protección de materiales, hasta los 240 microgramos, considerado el tope para dar alerta a la población.
Los meses de verano favorecen especialmente la concentración de ozono en la atmósfera, debido a que la mayor cantidad de luz solar incide en la aparición de esta sustancia gaseosa, problema que se ve aún más agravado si se trata de zonas donde se produce mayor contaminación y a primeras horas de la tarde. Suele ocurrir un par de veces en verano, apuntó Robisco, quien aconseja prudencia a la hora de exponerse al aire libre, aunque evitando caer en alarmismos.
Hay que recordar la diferencia que existe entre la capa de ozono, situada en la estratosfera y de carácter beneficioso, puesto que absorbe las radiaciones ultravioletas procedentes del sol, y el ozono troposférico, que se encuentra en la superficie y es un gran contaminante, es el que perjudica la salud y el entorno.
La Consejería de Medio Ambiente es la encargada del control y la vigilancia de los niveles de ozono dentro de la provincia a través de dos estaciones de medición, localizadas en Guadalajara y Azuqueca de Henares, respectivamente. Además cuenta con un dispositivo de unidades móviles que realizan mediciones esporádicas en diferentes puntos de la región.
El portavoz de Ecologistas en Acción, Alberto Mayor, denuncia que la ley debería recoger los efectos nocivos a partir de los 120 microgramos, en lugar de los 180 estipulados actualmente, ya que la mayoría de los días de verano se sobrepasan los umbrales de información. Por su parte, Robisco aseguró que el protocolo está siempre en marcha, sin distinción de la época del año de que se trate.
Según datos ofrecidos por el Centro regional de la Red de Vigilancia de la Calidad del Aire, el pasado día diez de julio se alcanzó una concentración media de 184 microgramos en la estación de Guadalajara, superando el umbral de información a la población.
En casos como éstos y para concienciar a los ciudadanos, Robisco recordó las principales medidas a tener en cuenta con objeto de evitar sobrepasar los umbrales de protección de la salud, fomentando el ahorro de energía y el transporte público, ya que con la quema del carbón o del gasoil se favorece la producción de ozono, además de impulsar un uso moderado de los aparatos de aire acondicionado.
Proximidad a Madrid
En el caso de Guadalajara, pese a no constituir una zona de elevada polución, donde no existe una gran industria ni un acusado volumen de tráfico, sus altos índices de ozono se podrían deber, según afirmó Alberto Mayor, a la proximidad con Madrid.
La cercanía al aeropuerto de Barajas, uno de los principales focos de contaminación, unido a la dirección en la que suele soplar el viento explicaría, en su opinión, la numerosa concentración de ozono en la provincia. En respuesta a algunas voces críticas que acusan de falta de información por parte de las instituciones, el concejal de Medio Ambiente señaló que a base de salir en los medios es cuando más se entera la gente del peligro de sobrepasar los niveles de ozono troposférico. Desde Ecologistas en Acción recuerdan haber realizado un reparto de folletos informativos, distribuidos a pie de calle, con consejos y recomendaciones.
Dentro de la región, Guadalajara se sitúa, tras Puertollano, como la localidad que supera en mayor número de ocasiones los umbrales de información y de alerta dentro de Castilla-La Mancha.
Le siguen los municipios de Azuqueca de Henares, Albacete y Toledo, en tercera, cuarta y quinta posición, respectivamente. La ausencia de Cuenca en este ranking se debe a que en esta localidad no hay estación de medición, según consideró el portavoz de la organización ecologista.
Con el fin de que los principales grupos de riesgo como son niños, deportistas o personas mayores se encuentren lo más protegidos posible, el Ayuntamiento de Guadalajara ha puesto en marcha, un año más, el protocolo de información de episodios de contaminación atmosférica. Este sistema alertará cuando se sobrepase el nivel establecido por la ley en más de 180 microgramos por metro cúbico de aire explica el concejal de Medio Ambiente, Lorenzo Robisco, y alertará cuando la concentración supere los 240 microgramos, además de dar notificación inmediata a los medios de comunicación. El propio Consistorio pone a disposición de los ciudadanos la posibilidad de darse de alta en su portal web para así recibir las alertas vía sms en sus teléfonos móviles.
Los distintos niveles de ozono, que se establecen en función de su mayor o menor incidencia sobre la salud de las personas, abarcan desde los 40 microgramos por metro cúbico durante un año, que corresponde al umbral de protección de materiales, hasta los 240 microgramos, considerado el tope para dar alerta a la población.
Los meses de verano favorecen especialmente la concentración de ozono en la atmósfera, debido a que la mayor cantidad de luz solar incide en la aparición de esta sustancia gaseosa, problema que se ve aún más agravado si se trata de zonas donde se produce mayor contaminación y a primeras horas de la tarde. Suele ocurrir un par de veces en verano, apuntó Robisco, quien aconseja prudencia a la hora de exponerse al aire libre, aunque evitando caer en alarmismos.
Hay que recordar la diferencia que existe entre la capa de ozono, situada en la estratosfera y de carácter beneficioso, puesto que absorbe las radiaciones ultravioletas procedentes del sol, y el ozono troposférico, que se encuentra en la superficie y es un gran contaminante, es el que perjudica la salud y el entorno.
La Consejería de Medio Ambiente es la encargada del control y la vigilancia de los niveles de ozono dentro de la provincia a través de dos estaciones de medición, localizadas en Guadalajara y Azuqueca de Henares, respectivamente. Además cuenta con un dispositivo de unidades móviles que realizan mediciones esporádicas en diferentes puntos de la región.
El portavoz de Ecologistas en Acción, Alberto Mayor, denuncia que la ley debería recoger los efectos nocivos a partir de los 120 microgramos, en lugar de los 180 estipulados actualmente, ya que la mayoría de los días de verano se sobrepasan los umbrales de información. Por su parte, Robisco aseguró que el protocolo está siempre en marcha, sin distinción de la época del año de que se trate.
Según datos ofrecidos por el Centro regional de la Red de Vigilancia de la Calidad del Aire, el pasado día diez de julio se alcanzó una concentración media de 184 microgramos en la estación de Guadalajara, superando el umbral de información a la población.
En casos como éstos y para concienciar a los ciudadanos, Robisco recordó las principales medidas a tener en cuenta con objeto de evitar sobrepasar los umbrales de protección de la salud, fomentando el ahorro de energía y el transporte público, ya que con la quema del carbón o del gasoil se favorece la producción de ozono, además de impulsar un uso moderado de los aparatos de aire acondicionado.
Proximidad a Madrid
En el caso de Guadalajara, pese a no constituir una zona de elevada polución, donde no existe una gran industria ni un acusado volumen de tráfico, sus altos índices de ozono se podrían deber, según afirmó Alberto Mayor, a la proximidad con Madrid.
La cercanía al aeropuerto de Barajas, uno de los principales focos de contaminación, unido a la dirección en la que suele soplar el viento explicaría, en su opinión, la numerosa concentración de ozono en la provincia. En respuesta a algunas voces críticas que acusan de falta de información por parte de las instituciones, el concejal de Medio Ambiente señaló que a base de salir en los medios es cuando más se entera la gente del peligro de sobrepasar los niveles de ozono troposférico. Desde Ecologistas en Acción recuerdan haber realizado un reparto de folletos informativos, distribuidos a pie de calle, con consejos y recomendaciones.
Dentro de la región, Guadalajara se sitúa, tras Puertollano, como la localidad que supera en mayor número de ocasiones los umbrales de información y de alerta dentro de Castilla-La Mancha.
Le siguen los municipios de Azuqueca de Henares, Albacete y Toledo, en tercera, cuarta y quinta posición, respectivamente. La ausencia de Cuenca en este ranking se debe a que en esta localidad no hay estación de medición, según consideró el portavoz de la organización ecologista.