Padres y profesores buscan fórmulas para mejorar la calidad educativa del niño sordo

En Castilla-La Mancha el tipo de escuela para este tipo de discapacidad es inclusiva, es decir, el niño está considerado como uno más dentro de su centro educativo. Sin embargo, para su desarrollo educativo requiere de ciertos medios que le permitan normalizar su situación dentro del aula, como medios tecnológicos, tales audífonos, implantes o equipamientos FM, y medios humanos, como técnicos en lenguaje de signos que permitan una integración en el aula, así como la necesaria integración con sus compañeros fuera de ella. En la actualidad esta combinación no llega a darse por completo, dependiendo muchas veces de la buena voluntad e interés que muestre el profesorado ante un niño sordo.
Evitar la problemática y crear un debate que invite a mejorar la calidad de la enseñanza del niño sordo fueron los puntos sobre los que giró el encuentro. Para ello, la jornada contó con una conferencia a cargo de la coordinadora del Servicio de Atención y Apoyo a las Familias de Apandat, Olga Fernández, quien adentró a los presentes en las últimas recursos tecnológicos para personas con déficit de audición, como equipos de FM, que ayudan a los niños a oír con mayor claridad y nitidez la información proporcionada por el docente.
Tras la ponencia se dio paso a un coloquio entre profesorado y familia que tuvo como fin buscar aquellas fórmulas que permitan, en última instancia, mejorar la calidad de la enseñanza proporcionada a sus alumnos e hijos, respectivamente.
Durante toda la jornada dos intérpretes de lengua de signos hicieron accesible los contenidos a aquellas personas con deficiencia auditiva.