Paralizado el traslado de 85 huérfanos de Ucrania a Pastrana
La iniciativa, gestionada a título particular por varias ONG, se ha encontrado con el rechazo del Ministerio y el Gobierno regional por "deficiencias técnicas".
La consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, comunicó este jueves que el convento del Carmen de Pastrana no acogerá de momento a 85 niños y 17 tutores procedentes de un orfanato de Ucrania. La consejera, que compareció en Guadalajara para informar sobre el programa especial de acogimiento familiar para los huidos de la guerra, explicó que esos niños se encuentran en estos momentos en un hotel a la espera de que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones determine su traslado a otro recurso de acogimiento. Torijano aseguró que el Gobierno de Castilla-La Mancha no tenía “conocimiento de manera formal” de la llegada en la madrugada del martes de este grupo a la base aérea de Torrejón de Ardoz, “dado que no vienen por el mecanismo oficial del Ministerio con el que nos coordinamos para las primeras acogidas”. El principal motivo para descartar el convento del Carmen para el acogimiento de estos huérfanos son las “deficiencias técnicas” halladas en las instalaciones. “Si el Ministerio estima oportuno que el recurso de Pastrana no es apto para estos menores (…), tendrán que decidir adonde van a ir. Si nos indican que en Castilla-La Mancha tenemos que acoger este u otro colectivo, sin ninguna duda se les va a atender con todas las garantías”. En este sentido, incidió en la “especial vulnerabilidad” del grupo procedente del orfanato, “por lo que tenemos que trabajar para que tengan todas las garantías de seguridad, protección y derechos que se merecen”. Igualmente, afirmó la consejera que esta situación es “extraordinaria”, dado que los niños vienen con al tutela del Gobierno de Ucrania, “por lo que ha de ser gestionado entre los países de España y Ucrania”. A este respecto, mostró su malestar con las entidades que “a título individual” gestionaron el traslado del orfanato, pues “con el afán de querer ayudar podemos perjudicar”.

En concreto, la Fundación Coprodeli es la que se ha encargado, junto con otras tres ONG –Milagros del Corazón, Fundación Madrina y Amica– de gestionar la llegada de estos huérfanos a Pastrana, algo que, por el momento, está paralizado. Manuel Alegre, uno de los responsables, señala que más de 40 voluntarios se han encargado de habilitar y equipar la mitad del convento del Carmen –la otra mitad funciona como hotel– para el acogimiento de este centenar de personas. “Hemos conseguido que haya agua corriente, agua caliente, camas, colchones, mantas, toallas, ropa… Hemos cambiado la instalación eléctrica, instalados diferenciales en todas las habitaciones y colocado extintores de incendio”. También cuentan con la cesión del comedor del hotel y con 4.000 kilos de comida. Por ello, no entiende la decisión de la inspección por el hecho de que no cuenten con calefacción. De hecho, asegura que hay una empresa dispuesta a instalar calderas de pellets. “Estamos en una situación de emergencia, la guerra ha llamado a nuestra puerta sin quererlo, tenemos que responder por responsabilidad”, señala.