Piden seis años de pena para el menor imputado

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
La Fiscalía de Menores de Sevilla solicitó ayer una condena de seis años de internamiento en un centro cerrado, seguido de tres años de libertad vigilada, para el menor conocido como el ‘Cuco’, imputado por la desaparición y el presunto asesinato de Marta del Castillo. El padre de la joven sevillana consideró “vergonzoso” que la Ley del Menor sólo permita condenar al ‘Cuco’ a la pena de seis años de internamiento, pues consideró que este menor de edad “ha matado y violado como un adulto”.
En el escrito de acusación presentado ante el Juzgado de Menores número 3 de Sevilla, el Ministerio Público pide para el ‘Cuco’ “la medida de mayor gravedad” prevista en la Ley para los supuestos en los que el autor de los hechos sea menor de 16 años en el momento de cometer los mismos, por entender que esta medida “es adecuada a la gravedad de los hechos y circunstancias del menor”.

De igual modo, la Fiscalía pide que el ‘Cuco’ indemnice al Ministerio del Interior en la cantidad de 616.319,27 euros, importe en el que cifra las labores de búsqueda del cuerpo de la menor tanto en el río Guadalquivir como en el vertedero de Alcalá de Guadaíra y en la localidad de Camas. Conviene recordar que, en el caso de los cuatro imputados mayores de edad, el Ministerio Público también solicitó que indemnizaran solidariamente al Ministerio del Interior en la misma cantidad.

Así, la Fiscalía solicita 52 años de prisión para Miguel Carcaño, asesino confeso de Marta, por los presuntos delitos de asesinato, dos delitos de agresión sexual y otro contra la integridad moral, mientras que pide ocho años de cárcel para su hermano, Francisco Javier Delgado, y cinco para Samuel Benítez y María García.

Además, reclama que estos cuatro imputados abonen de forma solidaria 160.000 euros a los padres de la joven, Antonio del Castillo y Eva Casanueva, y 30.000 euros para cada una de las dos hermanas, todo ello por “el daño moral derivado de la muerte de su hija y hermana, respectivamente, así como por el incremento del dolor y el ultraje a sus más íntimos sentimientos derivados de la imposibilidad de haber dado sepultura al cuerpo de Marta”.