Primera noche sin ‘botellón’ en la capital

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Será complicado volver a ver esta estampa en la capital.
No es la primera noche, pues oficialmente la Ordenanza de Convivencia Ciudadana entró en vigor el pasado miércoles, pero sí cuando se someterá a su primera prueba de fuego, pues es el viernes cuando los jóvenes acostumbraban a salir en masa a las calles para practicar un ‘botellón’ que ahora está prohibido. Ante la inesperada respuesta, la Policía Local reforzará esta noche su servicio para tratar de garantizar que se cumple la nueva normativa en toda su extensión. Los jóvenes, que no rechazan la ordenanza a priori, sí consideran que debería habilitarse un espacio para el ‘botellón’. Algunos creen que se trata de una norma más de fachada que real.
Sabemos lo que opina el equipo de Gobierno, la Oposición e incluso aquellos vecinos más afectados en los últimos tiempos por algunos de los aspectos que regula la nueva Ordenanza de Convivencia Ciudadana, como el botellón. Tanto políticos como entidades vecinales se han explayado en detalles, pero hasta el momento no habíamos prestado atención a qué es lo que piensa el otro colectivo más afectado por la normativa, los jóvenes. Esta noche, estos últimos, los jóvenes, y la Policía Local se enfrentarán a su primera noche de fin de semana sin botellón.
Desde el equipo de Gobierno, la postura es clara: la necesidad de la puesta en marcha de la Ordenanza de Convivencia es vital, pues es prioritario restablecer una convivencia que, según ellos, en los últimos tiempos ha desaparecido en la capital. Por su parte, los grupos en la Oposición, tanto PSOE como IU, han calificado la normativa de “represiva” y “amenazadora”, y lamentan que en vez de encauzar las situaciones conflictivas y de incivismo a base de diálogo y enseñanza, se afronten con sanciones mileuristas.
Por su parte, los vecinos, dependiendo de su grado de afectación por conductas que ahora regula la ordenanza, han expresado su opinión sobre la normativa en mayor o menor medida. Para los vecinos del casco histórico la nueva ordenanza es como agua de mayo. Están encantados de su puesta en marcha e incluso aseguran que empezaron a notar sus resultados antes de que hubiera entrado en vigor. El barrio de El Balconcillo, en este caso más afectado por el vandalismo y el incivismo que por el botellón, también se alegra de la llegada de la ordenanza, aunque echó en falta en el documento algunos aspectos, como el respeto a las personas mayores, pero también a los niños pequeños, que finalmente también se ha reflejado en el documento final.
La mayoría de los colectivos, incluida la Policía Local, que dejará de tener las manos atadas en muchos aspectos en los que antes no podía actuar por no estar reglados en ninguna ordenanza municipal, se alegran de la entrada en vigor de un documento que ha tardado un año en llegar pero que ya está aquí. Faltaba por conocer la postura de los jóvenes, los que desde ahora tendrán que encontrar nuevas ocupaciones para las noches de los fines de semana –algunos de ellos, pues la mayoría no es practicante habitual del botellón–.

Falta de espacios habilitados
La mayoría de los colectivos juveniles consultados no sentencian negativamente y a priori la nueva ordenanza, pero sí echan en falta algunos aspectos, por ejemplo, respecto a la prohibición del botellón. Entienden que se prohíba en zonas céntricas y cercanas a vecindarios, pero creen que el Ayuntamiento debería habilitar algún espacio para que los jóvenes o quien quiera pueda disfrutar de la noche con sus amigos en la calle, eso sí, siempre respetando unas normas cívicas, higiénicas y respetuosas mínimas. Por otra parte y ante lo caro que resulta para muchos bolsillos jóvenes pasar la noche de bar en bar o pub de la capital, entienden también que supone una razón más para que no se prohíba radicalmente el botellón. Por último, para algunos se trata de una norma “fantasma” que está haciendo “mucho ruido” pero que cuando pase este “boom” la gente volverá a hacer botellón, y la normativa no servirá para nada.

Dispositivo policial reforzado
El dispositivo policial que se desplegará hoy, primera noche de fin de semana en la que ya está en funcionamiento la nueva Ordenanza de Convivencia Ciudadana, comenzará a desplegarse por las distintas zonas detectadas como lugares habituales de botellón desde las 19.00 horas.
Además, el dispositivo se reforzará, sacando a la calle a mayor número de agentes de los que suelen patrullar en las noches de los fines de semana habitualmente. Como ya había adelantado la concejala de Seguridad en el Ayuntamiento de Guadalajara, María José Agudo, lo primero que harán los agentes será vigilar; en el caso de encontrarse con algún grupo de practicantes del botellón, les informarán, y si no desisten en su actitud, pasarán a ejecutar la nueva normativa, retirándoles las bebidas y los recipientes y tramitando la correspondiente denuncia, que podrá ascender hasta los 1.500 euros según el emplazamiento en el que se encuentren –hasta 3.000 puede llegar la multa si el botellón va acompañado de otras prácticas no permitidas, como por ejemplo, destrozos en el mobiliario urbano o deterioro de elementos arquitectónicos de interés histórico-.

No sólo el ‘botellón’
A pesar de que es la medida más conocida de cuantas integran la recién estrenada Ordenanza de Convivencia Ciudadana, no es la única ni la que mayor multa puede conllevar a sus infractores. Ensuciar la vía pública, orinar sobre ella o realizar pintadas, destrozar el mobiliario urbano o insultar puede implicar serias multas o trabajos para la comunidad al infractor.