Robledillo, Malaguilla y Alarilla reúnen firmas contra la secretaria

10/03/2016 - 12:23 D.Pizarro

La secretaria-interventora de los ayuntamientos de Robledillo, Malaguilla y Alarilla (Guadalajara) ha conseguido poner de acuerdo a los vecinos de estas localidades. Se han reunido cerca de 360 firmas en los tres pueblos para pedir la sustitución de esta funcionaria con plaza fija. Los alcaldes se muestran reticentes a mostrar públicamente su rechazo a una trabajadora que en estos momentos se encuentra de baja y que está previsto que regrese este verano. Sin embargo, reconocen que el trabajo que está realizando el secretario interino no tiene nada que ver con el que ejecutaba la titular.
    Aunque las firmas se recogieron por iniciativa particular en cada uno de los municipios, los alcaldes acudieron a la Junta de Comunidades en Guadalajara para mantener una reunión con el delegado del Gobierno regional en la provincia, Alberto Rojo. También se dirigieron a la Diputación provincial, pero el problema es que los secretarios-interventores son funcionarios nacionales para la administración local, por lo que la oposición que realizan es estatal y su régimen de sanciones dependería, en último término, del Estado.
    Eso fue precisamente lo que la Junta de Comunidades les han hecho saber a los alcaldes. Sin embargo, el problema de base ha sido el planteamiento de la petición de sustitución. Los regidores, en nombre de sus vecinos, solicitaron que se quedase indefinidamente en el puesto el secretario interino, procedente de una bolsa de trabajo de la Junta de Comunidades para cubrir estos puestos. Pero el Gobierno regional no tiene ningún tipo de competencia al respecto, simplemente facilita a los ayuntamientos sustitutos para las bajas de sus secretarios-interventores. Por tanto, una vez que finalice la de la titular, está en todo su derecho de regresar a su puesto.
    De cualquier forma, los alcaldes se muestran muy cautos e incluso preocupados a la hora de hablar sobre este hecho. El Ayuntamiento de Robledillo, no obstante, reconoce que se han visto perjudicados “numerosas ocasiones” por la forma de trabajar de la secretaria titular. “Presentaciones de presupuestos fuera de plazo, trámites que no se aprueban a tiempo, entrega de documentación de forma errónea...”. Son algunos de los problemas que han sufrido y que, en ocasiones, les han conllevado sanciones económicas. También se quejan de que la titular no cumple el horario que tiene fijado por contrato, de 8.00 a 15.00 horas. “A lo mejor llega a las 11.00 y se va a las 13.00”. Esto complica la resolución de trámites para los vecinos que no viven en el pueblo de continuo. “A lo mejor vienen expresamente de Madrid para pedir una licencia u otro documento y se encuentran con que la secretaria ya no está”, denuncian.
    Esta situación ha quedado “completamente” en evidencia con el “buen hacer” del sustituto. “Tiene la ventaja de que cumple, lleva todo al día, y además ha tenido que sacar adelante el trabajo atrasado de la anterior secretaria, que se remontaba a hace casi dos años”. Tanto es el malestar en el Ayuntamiento que incluso se han “planteado” dimitir. Pese a todo, son conscientes de que estas palabras pueden complicar “aún más” el ambiente. “Le dimos un toque de atención hace tiempo y la situación fue a peor, por lo que no podemos imaginarnos lo que pasará ahora”, señalan desde el Ayuntamiento sin querer dar nombres.
    Y es que la prudencia a la hora de hablar es la nota predominante en este caso. También en Malaguilla prefieren ser cautos, aunque reconocen que los problemas se repiten en los tres pueblos. “Es algo muy complicado de reconocer, pero sí criticamos que las formas que tiene esta empleada de atender al público no son las correctas, y su trabajo tampoco”, explica el Consistorio. Agradece que los afectados se hayan unido para emitir una sola voz al respecto, aunque desconfía de que les ofrezcan una solución. “Nos hemos reunido con la Junta de Comunidades y nos han dejado claro que el actual secretario no es titular de la plaza”.
    En Alarilla, por ejemplo, han llegado a tener problemas con el padrón. En las pasadas elecciones municipales se dieron cuenta que el INE les adjudicaba menos habitantes que los empadronados. “Nos dijeron no les habían llegado los ficheros”, reconocen. Eso les perjudica, por ejemplo, a la hora de recibir su parte de los Ingresos del Estado.
    De cualquier forma, el tiempo pasa y la incorporación se acerca, sin que los alcaldes sepan a quien dirigirse para solucionar el problema.