Ros defiende la trasparencia y legalidad de la venta de la sede
01/10/2010 - 09:45
Por: B.RETUERTA. GUADALAJARA
El presidente de Caja de Guadalajara, José Luis Ros, aseguró estar muy satisfecho con la venta que se ha hecho de la actual sede de la entidad financiera a la Junta y defendió la transparencia y legalidad de la operación.
Ros aseguró que como presidente ha informado de cada uno de los pasos, que conocían el Consejo de Administración y la Comisión de Control. El presidente de la entidad alcarreña calificó la operación de excelente. Hemos hecho un gran negocio pero no abusivo, porque ha sido tan sencillo como tasar el edificio por dos tasadores independientes. agregó.
En este sentido, Ros aseguró que se sintió sorprendido, disgustado, incluso cabreado por las críticas que se había hecho de la citada venta desde las filas del Partido Popular y se preguntó qué podría haber ocurrido si en vez de venderle el edificio a la Junta para seguir dando vida al centro de la ciudad, la operación se hubiera realizado con algún particular.
Ros negó rotundamente que las negociaciones se hubiesen llevado a cabo con secretismo. En este sentido, Ros justificó que no hiciera pública la compra porque siempre ha defendido que las cajas son entidades privadas y es ilegal divulgar lo que se debate en el Consejo de Administración. Por ello, hizo un llamamiento a que se respete la gestión de los profesionales que dirigen la entidad y defendió que la transparencia no puede estar reñida con el respeto más absoluto a los órganos de Gobierno.
Compra de acciones de Afirma
Por otra parte, salió al paso de las informaciones que han relacionando el primer cobro por la venta del edificio, dos millones de euros, con la adquisición de acciones del Grupo Afirma por ese mismo importe. Ros calificó de simple coincidencia una operación que hacen todas las cajas.
Esto no creo que haya una caja que no lo haya hecho, pero no una vez, sino muchísimas veces; es un uso frecuente, normal y legal, afirmó Ros, quien destacó que es una operación aprobada por el Comisión Nacional del Mercado de Valores dentro de la ampliación de capital realizada por la compañía Afirma.
En este sentido, Ros aseguró que se sintió sorprendido, disgustado, incluso cabreado por las críticas que se había hecho de la citada venta desde las filas del Partido Popular y se preguntó qué podría haber ocurrido si en vez de venderle el edificio a la Junta para seguir dando vida al centro de la ciudad, la operación se hubiera realizado con algún particular.
Ros negó rotundamente que las negociaciones se hubiesen llevado a cabo con secretismo. En este sentido, Ros justificó que no hiciera pública la compra porque siempre ha defendido que las cajas son entidades privadas y es ilegal divulgar lo que se debate en el Consejo de Administración. Por ello, hizo un llamamiento a que se respete la gestión de los profesionales que dirigen la entidad y defendió que la transparencia no puede estar reñida con el respeto más absoluto a los órganos de Gobierno.
Compra de acciones de Afirma
Por otra parte, salió al paso de las informaciones que han relacionando el primer cobro por la venta del edificio, dos millones de euros, con la adquisición de acciones del Grupo Afirma por ese mismo importe. Ros calificó de simple coincidencia una operación que hacen todas las cajas.
Esto no creo que haya una caja que no lo haya hecho, pero no una vez, sino muchísimas veces; es un uso frecuente, normal y legal, afirmó Ros, quien destacó que es una operación aprobada por el Comisión Nacional del Mercado de Valores dentro de la ampliación de capital realizada por la compañía Afirma.