Rosa María Calaf insta a ejercer un periodismo comprometido

Su nombre en sí mismo es su mejor carta de presentación. La periodista Rosa María Calaf pisó esta tarde Guadalajara 30 años después de que lo hiciera por última vez para abrir el ciclo de conferencias ‘Micrófonos en crisis humanitaria’, un programa con el que Cruz Roja quiere arrojar luz en torno a las relaciones que actualmente mantienen los trabajadores humanitarios y los periodistas, en ocasiones cordiales y complementarias, en otras tensas debido al enfrentamiento de intereses. Sobre ello, y en base a sus experiencias, Calaf ofreció una ponencia de la que fueron espectadores una treintena de personas, entre ciudadanos de a pie y profesionales de los medios de comunicación

A partir de sus recuerdos y anécdotas, Calaf se mostró muy crítica con el rumbo tomado por la profesión de periodista en los últimos años, supeditada más al morbo y la "cuenta de resultados de la empresa", que a la obligación que éste tiene con las víctimas o con sociedad en general. Quizá por ello Calaf pidió un mayor esfuerzo del profesional, con el fin de resistir a las presiones empresariales, mantener intacta su ética y así informar con rigor, contando lo que ocurre de la mejor y honesta manera posible.

Tampoco resulta un trabajo fácil el de los propios trabajadores humanitarios, a los que Calaf instó a realizar con compromiso su labor, al tiempo que buscar junto a los periodistas un equilibrio que permita a ambos remar en la misma dirección: la ayuda a las víctimas.